Volver a ser un ‘clam’

l próximo 19 de abril hará cuatro años que el Camp Nou hizo honor a la letra de su himno: fue un “clam”. La gran ovación que recibió el equipo fue tan atronadora como emocionante. Quizás fue el último día que al culé no le importó caer eliminado en cuartos de final de la Champions League ante la Juventus, en un partido en el que disparó 17 veces a puerta pero solo uno de ellos fue entre los tres palos, y fue repelido por el gran Gianluigi Buffon. Fue también la última vez que el barcelonismo estuvo unido. La temporada siguiente ya nada sería igual. Luis Enrique había marchado. Neymar se fue al Paris Saint-Germain y Andrés Iniesta preparaba su adiós.

Ahora que el entorno, el que disparaba cada día contra el anterior presidente, ha recuperado la ilusión, y que el otro entorno solo sueña con ver a su club en paz, sería recomendable que todo el barcelonismo recuperara la letra del “cant del Barça”, que interpretara en su justa dimensión cada frase escrita por Josep Maria Espinàs y Jaume Picas. Esa parte que afirma que todo el estadio es un “clam”, o la del “tots units fem força” que invita a la integración bajo la bandera azulgrana y el grito de “Barça, Barça”. O esa frase llena de perseverancia que dice “s'ha demostrat que mai ningú no ens podrá tòrcer”. Toca rescatar de verdad ese maravilloso himno, sentirlo, liberar todas esas palabras cantadas aunque sea desde el sofá de casa ahora que todavía la pandemia no permite la entrada de público a los estadios. El barcelonismo tiene ese himno, que es como una oración que invita a volver a creer, y no a la blasfemia, como se ha hecho en los últimos años

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