Es el momento de elegir el camino para crecer
Ganar la Liga con tanta anticipación le da a Xavi un tiempo ideal para elegir qué camino tomar para dar otro paso más en el crecimiento de su Barça. En el Camp Nou hemos visto muchas maneras de llevarse Ligas y todas válidas. El Barça de Johan ,elde Rijkaard, Pep, Tito o Xavi... a veces este Barça, salvando las distancias, me ha remitido al de Venables, campeón en 1985. Lo digo en el sentido del sacrificio, de la solidaridad, del correr por los demás, del aprovechar los recursos, frente a otros Barça más rutilantes en cuanto a magia ofensiva. El mérito es de Xavi, por adaptarse: la fórmula de poblar la media ha sido clave, pues hasta Raphinha es de esos extremos que juegan con el retrovisor puesto para ayudar a los de atrás. Ante la Real se volvió al plan de los extremos abiertos y se perdió. Este tramo final podría servir para darle todos los partidos a los Ansu y Ferran, por ejemplo, casi como un test pensando en el futuro. Con otros más jóvenes hay que ir con mucho cuidado.
A Pablo Torre se le trajo de Santander con el caramelo de jugar en el Barça y al final poco ha jugado. Lamine Yamal debutó con 15 años en Primera y eso tiene el riesgo de que el chaval ya sólo piense en aquello y se le haga eterno volver. Dar el salto es un paso que, salvo muy pocas excepciones, pide madurez física y mental. Hasta los 18 años es muy difícil tenerlas. Me alegro que Balde haya confirmado en su gran temporada todo lo bueno que ya le veía, seguramente por haber tenido la oportunidad en el momento idóneo.
Otro de los que me gustaría ver en la plantilla 2023-24 es Abde, porque tiene algo que cuesta encontrar: la capacidad de desatascar defensas cerradas. De esos hay que tener. Suenan ‘pivotes’ de distinto perfil. Al final, Xavi tendrá que decidir qué jugador pide en función del estilo de equipo que quiera ver ●