Mundo Deportivo (Bizkaia-Araba)
El ICL sorprende al anfitrión
El ICL Manresa frustró las esperanzas que tenía el MoraBanc Andorra de disputar su tercera final de Lliga Catalana consecutiva y le sorprendió con un triunfo en la otra semifinal (72-77) que hizo justicia a su mayor criterio y acierto en los instantes finales. De esta forma, el equipo de Ibon Navarro confirma las buenas expectativas que ha generado en esta pretemporada y será el rival del Barça Lassa en la final de hoy que tendrá como escenario el mismo pabellón andorrano (21.00 horas, Esport 3). Es la primera final de los del Bages en esta competición desde el año 2000, cuando perdieron ante el FC Barcelona. Previamente, en 1999, habían superado al Joventut para alzarse con el título.
Patrick Auda, con 20 puntos, y Scott Suggs, con 16, fueron los referentes manresanos y auténticos verdugos del conjunto andorrano por su determinación en los instantes finales y su acierto.
El Manresa empezó dominando pero la primera parte estuvo marcada por la igualdad en cuando el Andorra también cogió ritmo al partido. Lo mejor de los primeros veinte minutos fue un triple de Lluís Costa desde más allá de medio campo sobre la bocina final del segundo cuarto que dejó el marcador en 30-36 al descanso. A la postre la acción tendría su importancia.
El partido ganó en ritmo en el tercer cuarto y, aunque la entrada en el pavelló de Govern era pobre, el Andorra sintió algo más el empuje de su afición para recuperarse. De la mano de Stevic y Antetokounmpo firmó un parcial de 11-2 que le dio el mando de la situación aunque no de forma definitiva. Nacho Martín ayudó con un triple y una canasta en el poste a dar un paso más pero despertó Auda en un Manresa aguerrido que supo jugar sus bazas.
Esa iniciativa de los anfitriones se extendió en el último cuarto hasta que Suggs entró en racha. El alero americano del ICL anotó dos triples casi consecutivos para propiciar unos últimos dos minutos de igualdad. Auda le secundó con otra canasta de tres que colocó el 71-73 a 49 segundos y el dominio de la situación ya correspondió entonces a los del Bages que no fallaron en tiros libres y supieron jugar las últimas posesiones. Dos tiros libres fallados por Albicy y un triple de Schreiner que no tocó aro enterraron las esperanzas del MoraBanc