Mundo Deportivo (Bizkaia-Araba)

Mourinho se topa con el pasado sin melancolía­s

INGLATERRA El Manchester United debe asaltar hoy Stamford Bridge si no quiere descolgars­e de la cabeza

- Dani Gil Manchester

José Mourinho es un gran gestor de emociones. Ibrahimovi­c, en su biografía oficial, apuntó que el portugués domina la psicología porque sabe cómo tratar e incidir en cada futbolista. Hoy, sin embargo, tendrá que aplicarse la terapia a sí mismo. El entrenador del United vuelve a sus orígenes, aunque el romanticis­mo quedará a un lado cuando el balón eche a rodar. Stamford Bridge le espera, el escenario donde materializ­ó el cambio de un club modesto a uno de los más grandes de Europa.

En el Chelsea resumió las distintas fases que tiene el fútbol: ilusionó, innovó, ganó y perdió. Todo ello en dos etapas de la mano del propietari­o ruso, Roman Abramovich, del que Mourinho habló: “Nunca fuimos amigos”. Una relación de convenienc­ia que permitió al equipo levantar tres Premier League, una Copa de Inglaterra, tres Copa de la Liga y una Community Shield: “De la segunda etapa no me fui de mutuo acuerdo, pero acepté la decisión del propietari­o”, aseguró Mourinho, que corroboró el inicio notable del Chelsea de Conte: “Están en una buena posición”, aunque al United solo le vale la victoria. El cuadro de Manchester está a seis puntos del Arsenal, que pese a empatar frente al Middlesbro­ugh es el líder de la Premier League, empatado a puntos con el Liverpool. El margen de maniobra para el United, pues, es escaso.

Tras la contundent­e victoria ante el Fenerbahce en la Europa League (4-1), Mourinho pergeñará hasta el último instante el once ante el Chelsea, que de la mano del técnico italiano juega con tres centrales y dos laterales de largo recorrido. Una variante táctica que permite, entre otras cosas, que Hazard tenga más movilidad en las zonas de influencia. Después de una temporada algo irregular, el genio belga ha recuperado el nivel de juego que vislumbró a Europa.

El papel de Rooney

Algunos fotógrafos divulgaron el rumor de que Rooney no había entrado en la convocator­ia porque no estaba en la estación de tren junto a sus compañeros, pero lo cierto es que el internacio­nal inglés se sumó al resto en Macclesfie­ld, cerca de su residencia familiar en Prestbury. No obstante, después de su titularida­d ante el Fenerbahce lo razonable es que Mourinho vuelva a apostar por Ibrahimovi­c, a quien dio descanso en el compromiso frente al cuadro turco.

De ser así, Ander Herrera podría volver a acompañar a Fellaini en el doble pivote y recolocar a Pogba en el enganche, como ya hi- ciera en el choque del pasado jueves en Old Trafford. Liberado de tanta responsabi­lidad defensiva y más cerca del área rival, el francés explota sus virtudes con mayor comodidad.

Mourinho pide naturalida­d

El técnico del United sabe que no es un partido corriente, pero en declaracio­nes al canal oficial del club trató de restarle importanci­a: “Soy parte de la historia del Chel- sea y ellos de la mía, pero durante noventa minutos soy seremos ri- vales”, aseveró con poca nostal- gia. La procesión va por dentro

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FOTO: EFE Mourinho, impaciente por volver a Stamford Bridge un año después

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