Mundo Deportivo (Bizkaia-Araba)
Sabin se apunta para Bucarest
El delantero de Urduliz se reintegra a la actividad normal tras superar una sobrecarga en la pierna derecha
Al margen de la gran noticia que supuso haber visto a Yeray Álvarez hacer carrera continua y empezar a tocar balón, en el primer entrenamiento de esta semana decisiva para el Athletic por el compromiso europeo en Rumanía destacaron la presencia de Sabin Merino y ausencia de Javier Eraso. Kuko Ziganda ya dejó constancia de que el mediocampista navarro causaría baja debido al overbooking existente en el centro del campo.Tal y como se esperaba, el Leganés será su destino y el Athletic lo hizo ayer oficial.
Por otro lado, Ziganda también recibió otra buena noticia, como es la recuperación de Sabin, que andaba un poco renqueante en los últimos días a causa de unas molestias provocadas en la gira por Suiza. Sufría una sobrecarga en los músculos isquiotibiales de la pierna derecha. El punta trabajó con normalidad en la sesión y se postula como una alternativa en la derecha, en competencia con Susaeta.
Por lo demás, el entrenamiento se prolongó por espacio de una hora y media aproximadamente -la plantilla salió al exterior de las instalaciones unos minutos más tarde de la hora prevista para iniciar el trabajo-. En esta ocasión se habilitaron dos campos, el 1 y el 3, y los rojiblancos iniciaron la jornada con los habituales rondos y un ejercicio de conducción de balón por parejas, sorteando siluetas. En cierto modo este proceder recordó lo que a sucedía con Bielsa, que con frecuencia recurría al uso de ambos terrenos de juego.
Otra charla
Después se trasladaron al campo de juego habitual y Ziganda organizó una especie de partidillo de siete contra siete mientras el resto de la plantilla, bajo la supervisión de Arostegi, realizaba un ejercicio de control de balón con disparos a puerta y las tradicionales siluetas. Minutos después se intercambiaron los ejercicios.
En esos partidillos se pudo ver a San José en el centro del campo y a De Marcos, por ejemplo, de lateral derecho. Por supuesto, la intensidad de Ziganda se comprobó una vez más, ya que el míster navarro estuvo muy encima de los jugadores. Poco después, el entrenamiento finalizó con una serie de carreras y una charla de unos diez minutos de Ziganda con la plantilla