Las pruebas del nueve

Con Aduriz en el banquillo, las posibilidades de que el Athletic vea portería se reducen de forma significativa. Williams, su sustituto en el primer partido de Liga de la era Ziganda, tiene aún mucho recorrido por delante. No dudo, en cualquier caso, de la capacidad realizadora del bilbaíno porque siempre ha hecho goles.

Una simple cuestión de tiempo. De confianza. De tener claro que se trata de dos futbolistas distintos y con una diferencia de edad significativa.

Incidir en que Aduriz tuvo que salir dos veces de Bilbao para llegar a convertirse en la auténtica referencia ofensiva del Athletic parece obligado. Le costó lo suyo llegar a su status actual, pero lo consiguió. Williams, con 23 años, ya acumula 112 partidos como león. Paciencia.

Da cierto tembleque, en cualquier caso, asistir a la proyección de otros delanteros formados en Lezama que parecían llamados a asentarse en el primer equipo. Sabin Merino, que tuvo un esperanzador arranque con Valverde , se difuminó la pasada campaña por culpa, entre otras cosas, de las lesiones. Ziganda, que le conoce muy bien, no le ha dado mucha bola en este inicio de campaña.

A Villalibre, por su parte, se le acaba de ceder al Valladolid. La pasada Liga ya terminó en el Numancia. Una de las grandes esperanzas de Lezama vuelve a tener que hacer las maletas. Esperemos que sea para bien.

De Kike Sola tampoco tenemos noticias relevantes. Sigue en la plantilla, pero no va ni convocado. Toca esperar acontecimientos porque si alguien conoce bien al de Cascante es su actual míster.

O jo, por tanto, al estado de Aduriz. El Athletic sigue dependiendo demasiado de él. Al donostiarra le van los retos complicados, pero todo tiene un límite