Un dilema para Kuko

El primer mes de competición del Athletic ha sido exitoso, con la consecución del billete para la fase de grupos de la Europa League y la suma de cuatro de los primeros seis puntos en la Liga. Pero también ha servido para constatar algo que ya se pudo comprobar durante buena parte de la pasada campaña, que el fútbol del conjunto bilbaíno se ve beneficiado cuando Iker Muniain juega por dentro.

Los mejores momentos de los leones en el plano futbolístico, que no han sido muchos en estos primeros seis partidos oficiales, han llegado cuando el mediapunta navarro ha abandonado la banda izquierda y ha entrado en contacto con el balón por el centro. Su habilidad para moverse entre líneas y su capacidad como elemento desequilibrante han facilitado las acciones de ataque del equipo de Ziganda cuando más atascado estaba en su juego.

El problema es que esa posición de enganche por detrás de Aduriz está destinada, en principio, a Raúl García, que no aporta tanta fluidez en el juego como el de la Txantrea, pero muestra siempre una capacidad de remate muy necesaria para el cuadro rojiblanco. A hora la pelota está en el tejado de Kuko, que deberá ver si apuesta en más ocasiones por centrar a Muniain y, así, evitar que el Athletic acabe buscando un fútbol menos directo cuando falla el juego combinativo, como ya ha ocurrido varias veces en este arranque de temporada.

De momento, el pasado domingo el técnico situó a Iker por dentro cuando entró en Ipurua en sustitución de Córdoba y fue Raúl García el que estuvo desplazado a la izquierda durante los últimos 25 minutos del partido. Habrá que ver si en adelante se repite esta circunstancia más veces