Mundo Deportivo (Bizkaia-Araba)
Vuelve de vacío tras hacer sufrir al Racing
Los de Garitano caen por la mínima con buena actuación en El Sardinero
El ‘profesor’ Viadero se quedó la buena racha en El Sardinero ante el ‘alumno’ Garitano. Aunque el Bilbao Athletic, que se volvió a casa con esa derrota por la mínima (1-0), hizo sufrir al Racing hasta el final. Un tempranero gol de Rivero, en una de las pocas ocasiones que crearon los cántabros, decantó el encuentro. Ambos técnicos habían coincidido en el banquillo del Eibar en el curso 2009-10, también en Segunda B.
En la anterior salida, los rojiblancos tuvieron otra dura misión en Anduva y lograron un meritorio empate, la victoria voló en el último minuto. Ayer, los cachorros volvieron a dar la cara, pero esta vez no pudieron puntuar. El Racing llegaba al choque sumando 7 de los últimos 9 puntos que había disputado, sin haber encajado ni un solo gol. Por su parte, el Bilbao Athletic lo hacía después de seis jornadas sin perder, con empates en las cuatro últimas.
El primer tercio tuvo color santanderino. En el minuto 9 Rivero batió a Oleaga (Simón está con la sub-21) con un disparo con bote desde la frontal del área tras una pared con Tomás. Sobre la media hora, los de Garitano comenzaron a dar señales de peligro. Primero en una jugada en la que Regalón y Granero se hicieron un lío y a punto estuvo de aprovecharlo Nolaskoain, pero el meta Iván Crespo neutralizó la oportunidad. Lo intentó también Iñigo Vicente, su chut se fue muy cerca del poste. Justo antes del descanso, Álex García remató fuera de cabeza por muy poco una falta puesta en acción por Aquino.
Buena salida tras el descanso
A la vuelta de los vestuarios, los cachorros empujaron de lo lindo. Oportunidades. Un balón al que no pudo llegar Benito y lanzamientos de Tarsi y Guruzeta. Los locales reclamaron un penalti por una caída de Heber en el área bilbaína. Pero, de nuevo, los que dispusieron de una buenísima ocasión fueron los cachorros. A un cuarto de hora para el final, Andoni López remató un saque de esquina en el segundo palo, a quemarropa, pero el portero santanderino logró quitarse el balón de encima, con reflejos y sobre la misma línea.
Garitano movió ficha y metió a San Bartolomé, ante un centro del campo local reforzado, y a Dopi arriba. Lo intentaron hasta el último segundo. Embotellaron al Racing. Un par de faltas peligrosas, una de ellas con tiro de Guruzeta, llevaron el suspense a la grada. Esfuerzo sin premio