Señales de progreso

El Athletic sumó ayer un triunfo vital. Por varios motivos. Primero, porque los rojiblancos necesitaban la victoria después de tres derrotas y un empate en la Liga, segundo por concederse una cierta dosis de autoestima y tercero para continuar con la mejoría experimentada en la segunda mitad del partido de Mestalla, cuando fueron capaces de recortar distancias con el Valencia. E l partido realizado por los leones ayer a la hora del aperitivo quizá no llegó al nivel de estos segundos cuarenta y cinco minutos, pero el equipo de Ziganda sí que ofreció señales positivas en cuanto a la intensidad y a la presión sobre la salida de balón del equipo rival, virtudes que dieron muy buenos resultados en las temporadas anteriores. E l conjunto bilbaíno comenzó bien el partido, pero poco a poco fue perdiendo gas en favor del Sevilla, que jugó su mejor fútbol en los últimos veinte minutos del primer periodo. Antes del descanso apareció Kepa Arrizabalaga. El Athletic logró mantener el 0-0 en el marcador gracias a las intervenciones de su portero. El fútbol y sobre todo el puesto de guardameta tiene estas cosas. En Mestalla cometió dos errores decisivos y ayer salvó a su equipo para convertirse claramente en el protagonista del triunfo junto a Mikel Vesga ,el autor de la diana de los tres puntos. C uriosamente, cuando mejor estaba el Sevilla llegó el gol del Athletic. Un gol de los denominados psicológicos porque el gasteiztarra marcó en el minuto 43. El centrocampista se creció con este tanto y fue uno de los destacados en la segunda mitad, periodo en el que el Athletic supo cómo jugarle al Sevilla. Otro mérito para apuntar en la progresión del equipo