Mundo Deportivo (Bizkaia-Araba)
Otro sueño americano para Fernando
Alonso anunció ayer que pilotará en las 24 Horas de Daytona en enero de 2018 con el equipo propiedad de su jefe en Mc Laren, Zak Brown
Fernando Alonso lucía de nuevo una enorme sonrisa en la previa al GP de México de F1. Nada que ver con lo que pueda hacer este fin de semana en el Autódromo de los Hermanos Rodríguez, donde saldrá en la cola de la parrilla al tener que cambiar su motor. Su alegría se basaba en otro sueño americano que anunció ayer mismo: correrá las 24 Horas de Daytona del próximo 27 al 29 de enero de 2018.
La situación vivida ayer en México recordaba a lo que ya se vivió en el pasado GP de Bahrein, cuando el asturiano dejaba de lado el desastroso rendimiento del motor Honda en su MCL32 y anunciaba que correría las 500 Millas de Indianápolis con una enorme felicidad. El discurso, muy similar, quiere ser el mejor piloto de la historia y sabe que para ello debe ganar en otras categorías lejos del ‘Gran Circo’. Concretamente, lo hará al volante de un Ligier JS P217 en la categoría LMP2, que junto a la DPI (Daytona Prototipes), conforman la clase reina de esta histórica prueba.
Como en la Indy500, Alonso estará muy bien arropado, puesto que pilotará un coche del equipo United Autosports, que es propiedad el ahora director ejecutivo de Mc Laren, Zak Brown, que ya le ayudó en Indianápolis a correr con un coche aspirante al triunfo. Esta vez, la meta será la misma, ganar, con la esperanza de que ahora sí, el motor Gibson GK428 de más de 600 caballos, no le deje tirado como sí ha hecho el Honda en la F1 en los últimos tres años y como le pasó en la Indy500 con el propulsor de la marca nipona.
“Daytona es la carrera de resistencia más emblemática de los Estados Unidos y una de las grandes carreras del mundo. Todos lo saben. No forma parte de la Triple Corona, pero siempre lo he dicho, mi objetivo es ser un piloto completo y esta experiencia me ayudará en la preparación de cualquier otra carrera de resistencia en la que participe”, explicó Fernando, que en Daytona afrontará un reto total.
Será la primera vez que el asturiano comparta coche con dos compañeros, Lando Norris y a Phil Hanson, con los que hará relevos de varias horas, por los que deberá compenetrarse a la perfección para encontrar los reglajes adecuados a un trazado peculiar, que se compone de un óvalo y una parte de pista más estrecha y revirada, en su interior, llamado ‘infield’.
Muchos piensan que se trata de una prueba para preparar su asalto a las 24 Horas de Le Mans, algo que no rechazó Alonso, ya que expresó que “es una oportunidad de probar un prototipo, de subirme a él, de ver cómo es la conducción en un coche cerrado y probarme a mí mismo, como hice en Indianápolis y seguir mejorando. Si por mi fuera, pilotaría cada semana”. Sin embargo, Zak lo tiene claro: “Alonso irá a Daytona a ganar, no a preparar Le Mans. Creo que serán las 24 Horas de Daytona más duras de la historia moderna si nos fijamos en la calidad de los equipos y pilotos participantes”, expresó el estadounidense a ‘Motorsport’, jefe de un equipo competitivo que quedó nada más y nada menos que quinto en la general de la mítica prueba de resistencia francesa este año y cuarto en LMP2, además de ganar el pasado curso las European Le Mans Series en LMP3, que lideran este año, temporada en el que van segundos en dicho certamen en LMP2. La emoción está servida y Fernando ya piensa en un 2018 esperanzador. Antes, le falta correr la primera de sus últimas tres pesadillas con motor Honda para empezar de nuevo a soñar
Fernando Alonso
Esta carrera no forma parte de la Triple Corona, pero esta experiencia me ayudará en la preparación de cualquier otra carrera de resistencia”
Si por mi fuera, pilotaría cada semana”
Zak Brown
Alonso irá a Daytona a ganar, de lo contrario no querría hacerlo. No va para preparar las 24 Horas de Le Mans”