Mundo Deportivo (Bizkaia-Araba)
La lógica de la clasificación se impone en Lezama
Guruzeta siguió con su racha goleadora y Dopi sentenció a la contra
La clasificación no mintió en Lezama. La lógica de los números se impuso. El Bilbao Athletic realizó un ejercicio de superioridad y pegada ante el Caudal para reencontrarse con el triunfo después de tres empates seguidos y acercarse al playoff. Los asturianos, penúltimos, continúan en apuros. El filial tuvo la situación bajo control durante gran parte del encuentro, pero la primera ocasión fue visitante. Javi Sánchez filtró un pase entre líneas y dejó a Iker Alegre ante Unai Simón. El meta estuvo muy hábil y le arrebató el esférico desde el suelo sin que ni siquiera intentara el disparo.
A partir de ahí, los de Garitano se hicieron con el mando gracias a las incursiones de Larrazabal por la diestra. El extremo dispuso de un par de claras opciones antes de alcanzar el minuto diez. Primero chutó a las manos de Rabanillo y luego lanzó arriba tras una dejada con la testa de Benito. Vicente y Nolaskoain repartían juego desde el carril central con la intención de percutir posteriormente por los costados. La insistencia de Larrazabal tuvo su premio. Fue derribado por Invernón dentro del área y el árbitro señaló penalti. Guruzeta no perdonó y anotó su cuarta diana en las últimas cinco jornadas.
Gaizka fue el más insistente en el bando local, aunque se le resistió el gol. Lo buscó desde la frontal con un chut colocado y tuvo un claro mano a mano cerca de la media hora, pero no definió bien. El arquero desvió con las piernas. El Caudal consiguió nivelas las fuerzas en el tramo final del primer acto, pero solo inquietó con una falta lejana de Camochu.
Salva Unai Bilbao
Los asturianos dieron un paso al frente en la reanudación y gozaron de su mejor oportunidad en el primer minuto. Todo se originó en un mal pase atrás de Areso. El intento de Davo lo sacó Unai Bilbao sobre la línea. Alberto y Davo tampoco acertaron en sus lanzamientos desde fuera del área.
Poco a poco, el Bilbao Athletic se fue asentando y recuperó el dominio. Se juntó atrás, con la idea de salir por velocidad, y nunca sufrió en defensa. La sentencia se produjo en los compases finales. Dopi cazó un balón largo y, con todo el tiempo del mundo, superó por bajo a Rabanillo para atar los tres puntos