Mundo Deportivo (Bizkaia-Araba)
La risa, como el llanto, va por barrios
La gran preocupación de los leones, condiciones climatológicas en Bilbao al margen, era sumar los tres puntos
Minuto 82 de partido en el Ciutat de Levante y a buena parte de la afición granota le da por corear “burro, burro, burro” al colegiado Estrada Fernández. Un síntoma muy evidente de la impotencia de la hinchada local tras el autogol de Postigo poco después del empate de su equipo. Al colegiado, cómo no, le tocó pagar los platos rotos y la propia impotencia granota.
La alegría, dicen, va por barrios. Y ayer en el bilbaíno, lógicamente, todo eran abrazos y risas. La cita del Ciutat de València tenía una carga de importancia añadida dado buena parte del resto de los resultados de la jornada.
Los de Ziganda volvieron a sacar a relucir todas sus virtudes y buena
Algo inusual en estos días: ambos equipos jugaron con sus colores habituales
parte de sus defectos en este choque. El poco más de centenar de aficionados rojiblancos presente en el estadio así lo entendió. Del todo a la casi nada y de la casi nada al todo tras recibir el gol del empate. La reacción de orgullo y personalidad ahí queda.
Conscientes de la situación
Al Athletic le iba buena parte de su tranquilidad liguera en este partido del Ciutat de València. La gran preocupación de Ziganda y sus jugadores era lo que estaba a punto de suceder a ras de césped. Desde el Botxo llegaban, mientras tanto, informaciones relativas a un posible problema para que el vuelo de los leones pudiese aterrizar en Loiu esa misma noche dada las adversas condiciones climatológicas reinantes.
A los seguidores rojiblancos desplazados entre semana hasta Lviv para presenciar en directo el choque frente al Zorya y hacer turismo en Cracovia y alrededores aprovechando la semana del puente, ya les había tocado pagar las consecuencias del temporal. Su avión no pudo despegar y les tocó hacer otra noche más en la ciudad polaca, algo que no les impidió seguir en directo el choque. El futuro de los leones a ese respecto, el de volar, quedaba aplazado al menos hasta la finalización del duelo ante el Levante.
La afición local se entretuvo en los prolegómenos del encuentro, a la espera también del pitido inicial, con la final de la primera edición del ‘Levante eSports International Cup’, un torneo destinado a todos los aficionados de los juegos electrónicos, del FIFA 18 concretamente en este caso. El trofeo de campeón partió con destino a Dinamarca, tras la final ganada por el representante del Brondby al del PSV. ¡Cómo está el fútbol!
Tanto Levante como Athletic afrontaron este importante encuentro con sus colores reglamentarios. Todo un detalle. Los locales con camiseta azulgrana y pantalón azul. Los visitantes con casaca rojiblanca y calzón negro. Alguien tendrá que explicar por qué cuando se miden Barça y Athletic, por ejemplo, uno de los dos cambia su indumentaria.
El de ayer, centrándonos única y exclusivamente en lo sucedido a ras de césped, supuso una muestra más de superación del Athletic. A las bajas habituales por lesión de jugadores importantes en los esquemas de Ziganda se les unió esta vez la de San José, afectado por gripe desde el sábado por la mañana, y la de Etxeita, con una gastroenteritis de cuidado. Ambos se quedaron en el hotel de concentración a la espera del resultado del equipo y de si la expedición podía volver o no a Bilbao