Mundo Deportivo (Bizkaia-Araba)

Golpazo del Barça a la Liga en el Bernabéu

Los azulgrana se impusieron al Madrid con los goles de Suárez, Messi y Aleix Vidal y la distancia ya es de 14 puntos

- Roger Torelló Madrid

No hubo pasillo de inicio, pero sí después. El Barça hizo el pasillo hacia la Liga tras atestar un golpe casi mortal al Real Madrid en su propio campo ganando el Clásico por 0-3 y situándose a 14 puntos de los blancos. Los azulgrana consiguier­on controlar una primera parte en la que el Madrid fue superior -pese a que las ocasiones más claras fueron de Paulinho, a excepción de un remate al palo de Benzema-. Eso sí, tras el descanso, el Barça se destapó para dejar casi sentenciad­o el título. Los de Valverde se activaron en el juego a través de Messi e Iniesta y Suárez, el propio Leo , de penalti, y Aleix Vidal, en el último minuto, firmaron la goleada en el Bernabéu, justo antes de las Navidades y ante un Madrid que se quedó con 10 en el 63 por la expulsión de Carvajal y que pudo quedarse con 9 si el colegiado hubiera sacado la roja en lugar de la amarilla a Ramos por un manotazo a Suárez .

El Real, sin Isco y con Kovacic

Una muestra más del enorme respeto de Zidane por Leo Messi llegó con su alineación. El técnico decidió repetir el experiment­o que tan bien le funcionó en la Supercopa en verano y sentó en el banquillo a Isco para que fuera Kovacic quien estuviera pendiente de Leo.

El Madrid se jugaba la Liga y Zidane no estaba dispuesto, de entrada, a dar ventajas al rival. De inicio, la apuesta al técnico no le salió mal. El Madrid ahogó al Barça con una presión alta. Modric lideró a los blancos, buscando siempre las internadas de Marcelo y las llegadas de Cristiano. Además, trataron de aprovechar que en la primera parte el sol molestaba en la cara de Ter Stegen y los centrales, pero ni con esas lograron irse al descanso por delante.

A los 10 minutos, Cristiano tuvo una ocasión clarísima, pero el portugués hizo una pifia monumental y no consiguió rematar el balón que le había servido en bandeja Kross. Lejos de inquietars­e, el Barça siguió a su ritmo, se apoyó en Messi siempre que pudo y esperó su momento para dar el golpe.

Paulinho fue el arma de peligro en la primera parte para el Barça. El brasileño, que jugaba su primer Clásico, contó con dos ocasiones claras. A los 30 minutos, obligó a Navas a poner una mano milagrosa, que evitó el 0-1. Paulinho recibió dentro del área un pase de Messi y, tal y como le llegó, remató el balón obligando a Navas a lucirse. En la misma jugada, Piqué acabó derribado por Carvajal pero el árbitro no pitó el penal.

Y del posible gol de Paulinho y el penalti no pitado a Piqué, se pasó a la ocasión más clara del Real. Esta vez fue Ter Stegen quien se lució. El alemán, uno de los sostenes del equipo esta temporada, sacó la pierna para que el remate de Cristiano acabara en córner. Solo tres minutos después, el Real volvió a a tenerla, ahora con Benzema. El partido entró en un toma y daca, y Paulinho respondió con otro remate. Esta vez cabeceó un centro de Messi, después de una estelar triangulac­ión entre Alba, Iniesta y Leo, que obligó a Navas a estirarse.

Justo antes del descanso, Benzema dispuso de la ocasión más clara. El francés, que acabó pitado, remató de cabeza al palo un centro de Marcelo.

Un Barça arrollador

Del dominio sin gol del Madrid de la primera parte se pasó a un festival completo del Barça en la segunda. Suárez, hasta entonces más bregador que intimidado­r, desequilib­ró la balanza en el 53. El uruguayo remató un centro desde la derecha de Sergi Roberto, tras una jugada que inició Rakitic, que condujo desde el centro del campo sin oposición porque Kovacic más pendiente de Leo que de él.

Con el gol, el Barça se vino arriba, dispuesto a sentenciar el partido y la Liga. Messi acabó transforma­ndo el 0-2 de penalti en el 62, después de una jugada de interminab­les ocasiones para el Barça. Primero remató Suárez y en el rebote Paulinho, que obligó a Carvajal a despejar con las manos para que el balón no entrara. Ese gesto le valió la expulsión al lateral y el consecuent­e penalti que marcó Leo, de nuevo, con celebració­n especial ante la grada del Bernabéu. Zidane trató de arreglar el desaguisad­o con Bale y Asensio, pero el Barça puso la guinda con el 0-3 de Aleix Vidal en el primer balón que tocaba. Feliz Navidad culé

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FOTO: PEP MORATA Piqué celebra el 0-3 señalando a la zona de los culés en el Santiago Bernabéu mientras sus compañeros rodean a Aleix Vidal, autor del gol

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