Mundo Deportivo (Bizkaia-Araba)
“SÉ QUE VOY A SUFRIR”
La quintaesencia de los cuadros alegres se reúne el domingo en el Bizkaia con dos pelotaris de pura cepa. A Jokin Altuna (Amezketa, 1996) no le asusta desafiar a un Aimar Olaizola que tiene 16 años más. El guipuzcoano asimila con entereza que no será ajeno a la tensión que surge antes de una final manomanista y se desenvuelve con una madurez inusitada para ser tan joven. El interior de Gipuzkoa estaba gris y el Txindoki se escondía bajo las nubes. Para Altuna III, “seguro” que sale el sol. Contagia optimismo. Las entradas de la final se agotaron en cuanto usted llegó a 22 contra Ezkurdia. Es bonito y me motiva. Señal de que este año estamos haciendo las cosas bien. ¿Esperaba llegar hasta aquí?
Tenía claro que podía jugar bien mano a mano, pero no me esperaba llegar a la final. Lo veía difícil, sobre todo viendo el sorteo que me tocó. Poco a poco me he ido viniendo arriba. ¿Considera que su rama era más compleja que la de Olaizola II?
Diferente. Pero aquí hay que jugar bien contra todo el mundo. Si no, es imposible ganar juegues contra quien juegues. Todos los partidos de Aimar han sido muy buenos. Se ha metido en la final por méritos propios. Es cierto que yo he podido tener un sorteo más duro, pero Aimar es capaz de derrotar a grandísimos rivales. Antes del Campeonato no me imaginaba que pudiera ganar a Retegi Bi, Urrutikoetxea y Ezkurdia. Estoy muy contento. Su crecimiento como manomanista está en boca de todos. Cada uno tiene sus armas y hay que saber aprovecharlas. Más que el juego, lo que cambia es que vas aprendiendo con los años. Estar en la final es un premio enorme para mí. Usted es muy amigo de ir improvisando durante el partido. ¿Ha hecho lo mismo en los tres anteriores? Si vas con una sola táctica al partido y el rival te está comiendo la ‘tostada’, luego es muy, muy difícil remontar. Hay que tener más armas. ¿Estudiar magisterio le ayuda a tener la cabeza tan bien amueblada en el fragor de la batalla? Bueno, en esos momentos tampoco te pones a pensar en todo lo que haces fuera del frontón, pero me considero un chico bastante centrado. Igual alguna vez me he salido de un partido y creo que es mejor mantener la cabeza fría. Este Campeonato he estado centrado siempre y me ha ayudado mucho. ¿Está de acuerdo con que no hace falta ser el mayor pegador del mundo para ser un buen manomanista? Sí. Hay que tener muchos recursos y
saber exprimirlos. Ser constante y saber sufrir. He respondido en todo tipo de momentos. ¿Cuál es su mayor virtud?
No lo sé. Igual que soy atrevido. Vosotros sabéis más cómo juega cada uno, qué estilo tiene, qué os gusta de los pelotaris. ¿Nota que su contraataque desconcierta a los rivales?
Sí. Al final, si sabes que el rival te puede terminar el tanto te pones un poco nervioso y lo mejor entonces es terminarlo tú antes. A veces sale, pero otras no. Su contrincante en la final, Aimar Olaizola, no juega igual ahora que cuando tenía su edad. Su estilo ha cambiado, sí. Antes jugaba mucho más tranquilo y ahora es más agresivo. Ha evolucionado. Siempre ha tenido claro cómo ganar y
siempre lo ha hecho bien. ¿Se ve como Aimar cuando tenga su edad?
Mi mayor objetivo es estar muchos años ahí arriba, pero no me quiero comparar con él porque es de los más grandes de la historia. Quiero seguir aprendiendo, meterme en las finales de los campeonatos y también rendir el resto del año. ¿Cómo son estos días para usted? ¿Se pone nervioso o mantiene la calma? Sin duda, nervioso. Hombre, estar con un poco de tensión no te tiene por qué afectar. El objetivo es ganar la txapela, pero sé que voy a sufrir. Entre en los detalles que usted quiera: ¿Cómo se le gana a Olaizola II? A la mínima que le regales un poco, te remonta. Y te gana fácil. Tengo que jugar perfectamente. ¿De quién es Altuna III, Irujo o Aimar?
Yo siempre he sido de Irujo, pero cuando debutas lo ves todo de manera diferente. Conocí a Aimar y me ganó como persona. ¿Le gusta el Bizkaia?
Sí, he jugado buenos partidos allí. Es cierto que el ritmo de los tantos es un poco más lento y a mí me gusta que la pelota salga más viva del frontis. ¿Está cambiando de rutina esta semana?
No, hago igual todo. Es mejor no cambiar nada. Es verdad que es una
Es cierto que mi rama ha sido más dura, pero Aimar Olaizola se ha metido en la final por méritos propios”
Vosotros sabéis más cómo juega cada uno, qué estilo tiene, pero mi mayor virtud es que soy bastante atrevido”
Olaizola II ha evolucionado en su estilo y de jugar muy tranquilo ha pasado a ser más agresivo”
final, un partido pero prefiero normal. tomármela Innovar con como experimentos peor. los días anteriores es ¿Suele previos? dormir bien esos días
Sí, sí. El día anterior siempre me cuesta más, pero en lo que va de semana estoy durmiendo bien. ¿En quién se apoya?
En mi familia, mi pareja y en los mejores amigos que tengo. Saben que me gusta mucho desconectar cuando estoy con ellos, no hablar demasiado del partido y por eso estoy cómodo. En la calle ya te comentan de todo sobre la final. Es normal y lo cojo con gusto, pero valoro mucho desconectar. ¿Qué más hace para escapar de la presión?
Escuchar música, dar un paseo o salir un poco al monte. También me gusta ir al cine o salir a la costa. Cuando hace buen tiempo me suelo acercar a Zarautz, Orio o Donostia. ¿Se atreve con alguna promesa si gana el domingo?
(Se ríe). Si gano, hago lo que me digáis. Gane o pierda, habrá que hacer una cena, eso seguro. ¿Qué habría sido Jokin Altuna de no haber llegado a pelotari?
(Se lo piensa). Me gusta muchísimo el deporte. Quizá me habría dado por alguna otra disciplina y si no algo relacionado con el magisterio deportivo. En el futuro me gustaría ser profesor de gimnasia. ¿Cómo lleva la carrera?
Bien. Voy por el tercer año. Mi planificación pasaba por sacarla en cinco. Me faltan cuatro asignaturas de segundo y este año quiero sacar cinco de tercero. El que viene sacaré las que me falten y al final las que me queden de cuarto. Luego ya tendría que hacer oposiciones para poder dar clases. Me gustan mucho los niños y estoy cómodo en este ámbito