Mundo Deportivo (Bizkaia-Araba)
La radiografía individual revela una mala temporada
El rendimiento de buena parte de los componentes de la primera plantilla del Athletic estuvo bastante por debajo del nivel habitual
Hoy hace algo más de una semana concluía una de las peores temporadas de la centenaria historia del Athletic. Una campaña que ha traído consigo la ruptura del contrato en vigor de Kuko Ziganda. El navarro, tras siete campañas como león y otras tantas como técnico rojiblanco, fue relegado en sus funciones antes de lo pactado.
Buena parte de las críticas de esta frustrante y desilusionante campaña ha recaído en la persona de Ziganda. El míster rojiblanco, que no tuvo ningún rubor a la hora de asumir su responsabilidad y de reconocer públicamente que no había dado con la tecla, ya ha hecho las maletas mientras el club rojiblanco sigue sin anunciar el nombre de su sustituto. Todo apunta a Berizzo, pero...
Los males del Athletic en esta temporada de infausto recuerdo trascienden más allá, en cualquier caso, de la figura del entrenador. La grave lesión de Muniain, la recaída de Yeray, el culebrón Kepa con el Real Madrid, la marcha de Laporte al City previo pago de los 65 millones de su cláusula, la llegada de Iñigo Martínez por idéntica vía previo desembolso a la Real de los 32 millones de su cláusula, las bajas por problemas físicos de los hasta ahora incombustibles De Marcos y Balenziaga, el desconcierto existente en el centro del campo, los problemas de Williams para ver portería en San Mamés en Liga, el bajón en la eficacia realizadora de Aduriz, la pobre animación en San Mamés.
Los males del Athletic tienen que ir enfocados en más de una dirección. Ahí va el repaso