Mundo Deportivo (Bizkaia-Araba)
Sangre nueva en el banquillo para resucitar a la Roja
Julen Lopetegui Agote (Asteasu, Guipúzcoa, 28 de agosto de 1966) llegó al banquillo de la selección para resucitarla tras dos decepciones seguidas: el Mundial de 2014 y la Eurocopa de 2016. Dos fracasos que supusieron el adiós de Del Bosque. No era fácil ser el relevo de un mito y, además, devolver los títulos a la selección, pero Lopetegui parece que ha encontrado el camino. El seleccionador suma un total de 20 partidos sin conocer la derrota y eso ha provocado que España se presente en Rusia como una de las favoritas al título, algo que Lopetegui acepta, pero sabe que eso no significa nada.
El vasco, seleccionador exitoso en las categorías inferiores, ha rejuvenecido a la Roja y su primera decisión fue no convocar a ilustres como Casillas o Cesc. Eso no quiere decir que Lopetegui se haya olvidado de ilustres veteranos como Iniesta, Ramos o Silva y ha recuperado a Reina que son los únicos supervivientes de la época dorada de la Roja en Rusia. Sin embargo, el vasco ha ido llamando a los jóvenes que triunfaron con él en las categorías inferiores.
Lo que no ha cambiado es el juego de España, el toque, aunque Lopetegui ha mostrado que no sólo de eso vive España. Ha mostrado una gran versatilidad a la hora de cambiar de sistema en un mismo partido para buscar la victoria. Ahora, en Rusia, le llega la hora de la vedad