Mundo Deportivo (Bizkaia-Araba)
Jorge Sampaoli quiere atacar a Islandia por los costados
1- Argentina cree que la selección nórdica se cerrará por el medio 2- Messi liderará un equipo que ya tiene su once totalmente definido
Jorge Sampaoli no es de repetir equipos. Jamás lo hizo desde que se vistió con la ropa de la Selección de Messi. Que lo haga tres prácticas seguidas es más que un indicio. Ese ensayo reiterado en Bronnitsy más la información que surge desde la intimidad lo marcan: Argentina ya tiene el once para el debut en el Mundial que debe ser el Mundial de Messi. Islandia puede tomar nota: Caballero; Salvio, Otamendi, Rojo, Tagliafico; Biglia, Mascherano; Meza, Messi, Di María; y Agüero.
Argentina tiene un plan de partido para algunas decisiones que han llamado la atención. Salvio no es lateral derecho. Nació como delantero en Lanús y se hizo mediocampista en su inserción en Europa. Pero jugará allí porque Sampaoli cree que Islandia se cerrará por el medio y el entrenador quiere atacarlo por los costados. Ante ese plan, mejor alguien agresivo en el juego ofensivo y no un defensor que se pueda nublar al proyectarse. Cuando Salvio y Tagliafico pasen al ataque, Masche será el relevo con Biglia en el centro del campo.
Adelante la idea es hacerle ancha la cancha a Islandia. Sacar gente del fondo al rival, uno que ocupa espacios pero no persigue desde su parado táctico con dos líneas de cuatro. Entonces, con Meza-Salvio por derecha y Di María-Tagliafico por izquierda, queda una zona Messi por el medio. Más el Kun, que no es un 9 que les entregue referencias al rival porque sale y entra al área. Así, en el partido ideal imaginado, Leo puede encararlos de frente y romper desde ese lugar el partido.
Se sabe: en la pizarra nunca un entrenador ha perdido. Lo bueno es que no sólo se mira para adelante. Sampaoli trabajó en el aspecto defensivo, donde no da garantías. Ahora habrá un 5 posicional para que los marcadores centrales no queden mano a mano y si al salir Mercado pierde un cabeceador, con Biglia lo recupera.
Así, la albiceleste busca hacerse fuerte. Es consciente de que no parte como candidato. Pero lo importante son estos 30 días y cómo esté Messi