Mundo Deportivo (Bizkaia-Araba)
Villalibre se la juega
Después de dos cesiones en este curso, el delantero debe dar un golpe en la mesa
Después de aquel debut como león el 4 de diciembre de 2012 ante el Eibar, con asistencia de lujo a Iker Muniain para que marcara el tercer gol de la jornada al Eibar, el panorama ha cambiado de una manera significativa para Asier Villalibre. Una de las esperanzas más sólidas en la cantera de Lezama ha vivido desde entonces una situación inesperada a la que le urge un viraje inmediato y contundente. En la pretemporada que está tan cercana a empezar, el fornido delantero de Gernika tiene que dar un golpe en la mesa. Si no es en la primera plantilla bilbaína, en otro club, al que supuestamente iría cedido.
El peso de Mata
A sus apenas 20 años ha pasado por dos experiencias en forma de cesión por las que ha tenido que tributar una ausencia de protagonismo que le perjudica de una manera especial para su progresión. Su paso por el Valladolid no ha estado acompañado por el disfrute. Llegó a disputar 14 partidos sin apenas ocasiones para marcar. De hecho no ha marcado en la competición liguera, si bien en la del KO dejó un par de muescas después de haber jugado cuatro encuentros.
Como quiera que la sombra del supergoleador Mata ha sido muy alargada y que disponer de minutos parecía casi imposible, Villalibre emprendió viaje a Lorca esta misma temporada pasada en busca de algo más de incidencia en el juego, con resultado adverso: tampoco ha contado demasiado para el entrenador y no ha marcado. En el ejercicio anterior, vivió una situación muy llamativa, porque también tiró por la calle de la cesión, en este caso al Numancia, para hacer frente a seis partidos muy al final de la campaña.
1 SIN PROTAGONISMO Su paso por Valladolid y Lorca no le ha concedido continuidad LAS CLAVES 2 ESTÁ A TIEMPO A sus 20 años debe y puede progresar si le dan confianza
Un hándicap
“Que los jóvenes vayan por ahí y no jueguen es un hándicap muy grande para nosotros y para ellos, para ellos porque son experiencias en las que tienes que aprender y si no te dan las oportunidades que esperabas, igual valoras más todo lo que tienes aquí, que a veces uno no se da cuenta”, decía Ziganda a principios de febrero en relación con Villalibre, aunque su mensaje es extensible a cualquier meritorio que se busca la vida lejos de Lezama. Ahora Villalibre no puede vivir episodios de estancamiento y debe reivindicarse