Berizzo y los 34 leones

Míster nuevo, victoria segura. Este viejo dicho futbolero, en una versión más o menos literal, suele aplicarse cuando se produce un cambio de entrenador en plena temporada. En Bilbao, pese a las voces discordantes de cierto sector del llamado entorno rojiblanco, ha habido que esperar hasta el arranque de campaña para que el sustituto de Kuko Ziganda entre en acción.

Interesante la declaración de intenciones efectuada por Berizzo ayer en su primer día de trabajo en Lezama. El entrenador argentino dejó patente que sabe manejarse ante la prensa y, al mismo tiempo, transmitir un mensaje que cale en la afición. El verde se encargará luego de poner a cada uno en su sitio.

Se pueden extraer varias lecturas de la propuesta manifestada por el nuevo técnico rojiblanco. Todas, cómo no, invitan a la ilusión, a la esperanza, a la diversión. Berizzo, por si acaso, se encargó de dejar muy claro que todo pasa primero por convencer a sus jugadores de que la idea es factible y, a partir de ahí, de que el grupo se comporte como tal y actúe en consecuencia.

Teoría pura y dura, pero con una base lo suficientemente consistente para empezar a creer. Del dicho al hecho, en cualquier caso, hay un trecho. Dentro y fuera de Bilbao.

El Athletic arranca de partida con una gran plantilla a nivel numérico. De los futbolistas que ayer posaron en la foto de grupo sobran al menos una decena. Todos, a tenor de las palabras del propio entrenador, van a tener, eso sí, su correspondiente oportunidad.

Resulta conveniente, por tanto, ir paso a paso. No dar nada por seguro, ni a nadie por fijo o descartado. Berizzo se ha puesto al frente de la nave rojiblanca y ahora solo le queda llevarle a buen puerto. Casi nada