Pocos datos para valorar

Falta una semana para que vuelva la competición para el Athletic, con la siempre exigente visita del Real Madrid a San Mamés, y no sabemos si con esta segunda pretemporada que el equipo rojiblanco está realizando durante este largo parón se ha producido algún tipo de progresión en el nivel futbolístico que mostraron los leones en los dos primeros partidos de Liga. Los sucesivos entrenamientos a puerta cerrada y el amistoso sin público ante el Valladolid no han permitido que nos podamos formar una imagen más concreta sobre el momento que atraviesa el conjunto bilbaíno.

Yesta duda no es baladí, ya que los de Berizzo tienen por delante una segunda quincena de septiembre con una exigencia alta. Después de medirse al equipo blanco, al Athletic le resta pasar por el campo del Betis, recibir al Villarreal y visitar al Barcelona. Cuatro compromisos de altura para poner el proyecto del Toto en su sitio tras un inicio un tanto titubeante.

La única pista a la que nos podemos agarrar es el denominado por el club ‘partido de entrenamiento’, disputado en la tarde del jueves en Lezama ante el cuadro pucelano. Poco podemos extraer como consecuencia los medios de comunicación al no tener la oportunidad de contemplar las evoluciones de los leones.

Solo sabemos que, ante la ausencia de los lesionados Aduriz, Iago Herrerín y Lekue y los internacionales Iñigo Martínez, Unai Simón y Núñez ,el técnico argentino dio minutos a sus otros 20 hombres, con el añadido de los cachorros Oleaga y Gorka Pérez. El dato más positivo es que el conjunto rojiblanco se impuso a un equipo de Primera y, además, remontando un resultado adverso. Ojalá sea un buen augurio