Mundo Deportivo (Bizkaia-Araba)
Siguen sin saber ganar fuera
Los blanquiazules empataron 2-2 ante un Rayo, que en muchas ocasiones lo puso contra las cuerdas, con goles de Borja y Granero
El Espanyol volvió a suspender la asignatura pendiente de ganar fuera de casa. Logró un empate a dos ante el Rayo, y gracias, merced a los tantos de Borja Iglesias y Granero. Los arranques de las dos partes sirvieron para que los locales anotaran sus dos dianas. Tras un fallo defensivo catalán, Raúl de Tomás puso el 1-0 y en la reanudación, Kakuta transformó un penalti de Dídac sobre Advincula.
Si en esta Liga los perico han convertido Cornellà-El Prat en un auténtico fortín sumando nueve de nueve, lejos de él solo ha sumado dos puntos de los doce disputados. El día y la noche. Los de Rubi trabajaron para el triunfo pero en muchas fases del encuentro estuvieron a merced de los de Míchel. No fue el mejor partidos del Espanyol. Tiene once puntos y sigue en lo alto de la tabla a la espera de los resultados de sus rivales.
El tercer partido en siete días dio lugar a nuevas rotaciones. El técnico Joan Francesc Ferrer, ‘Rubi’ introdujo cinco caras nuevas en el once respecto al que la pasada jornada venció al Eibar por 1-0. Javi López entró por Rosales; Naldo, por Óscar Duarte; Víctor Sánchez, por Darder; Granero por Melendo; y Borja Iglesias por Piatti. Esos fueron los cambios frente a un Rayo Vallecano que salió con una ausencia destacada: el extremo Álvaro García se quedó fuera.
No empezó nada bien el Espanyol. No salió enchufado como en las otras seis anteriores jornadas y a los seis minutos encajó un gol tras un fallo defensivo. Raúl de Tomás se hizo con el balón y disparó a puerta cómodamente. Los de Míchel tenían el partido donde querían, se echaron atrás e intentaron ralentizar el juego. Pero los pericos empezaron a sobreponerse de la ‘pájara’ inicial y poco a poco empezaron a crear peligro sobre la portería de Alberto. La valentía y ambición tuvo su premio: Borja Iglesias marcó en el 19’ el tanto del empate. La jugada la inició Javi López, que centró al segundo palo, Hermoso remató en primera instancia el balón, lo rechazó Alberto y el ‘Panda’, atento, lo envió al fondo de la red.
Con el 1-1, el Rayo se vio forzado a salir de su área para intentar adelantarse, de nuevo, en el marcador mientras los blanquiazules sufrían para sacar el balón y salir al contraataque. Muchos pases imprecisos por parte de ambos equipos aunque los locales tenían dominada la situación, embotellando a los visitantes en su área.
Los minutos finales de la primera parte transcurrieron en una ida y vuelta, hasta que Granero, cuando nadie se lo esperaba, marcó el segundo gol de los pericos justo en el 45’. Sergio García intentó una volea que toca en un defensa y el rechace le cayó a los pies de Granero, que batió a Alberto de disparo ajustado al palo.
La segunda parte también empezó de la peor manera para el Espanyol. A los dos minutos de la reanudación, Dídac cometió penalti sobre Advíncula. Kakuta se encargó de lanzar la falta máxima, transformándola y colocando el 2-2 en el marcador. Los pericos no se vinieron abajo, sino todo lo contrario. Se enchufaron rápidamente al partido con el objetivo de volver a desnivelar la balanza. Pero, como viene sucediendo desde que empezó la Liga, les faltaba pegada para concretar las jugadas. Fallaban las oportunidades que creaban mientras el Rayo frenaba como podía al rival y salía tímidamente al contraataque. En el 73’, Embarba dispuso de una doble ocasión que fue salvada en primera instancia por Diego y en segundo, por Hermoso.
El Rayo empezó a hacerse dueño del encuentro y el Espanyol se limitó a defenderse e intentar, cuando le dejaba el rival, salir al contragolpe. Pero la suerte no estuvo de cara para los pericos. En el 90’, Hernán Pérez cayó dentro del área, según los pericos, y fuera, según los rayistas. El árbitro Alberola Rojas pidió ayuda al VAR y éste dictaminó que la falta era fuera. El encuentro no dio para más