Mundo Deportivo (Bizkaia-Araba)
Un boom poco explosivo
Las series documentales sobre fútbol se han puesto de moda, pero les falta algo
El 2018 puede considerarse el año del boom de las series documentales sobre fútbol. La época dorada de las series de ficción, sumada a la nueva afición a las series documentales (especialmente centradas en la temática criminal) ha generado una secuela televisiva vinculada al ámbito deportivo.
Empezó la tradición en Estados Unidos con series documentales relacionadas, sobre todo, con el fútbol americano. Poniendo el foco sobre los distintos equipos de la NFL, jugadores estrella, o equipos menores dedicados a la reinserción social a través del deporte, han sido la inspiración para que en Europa empiecen a aparecer las series documentales futbolísticas, algunas de ellas comentadas anteriormente en esta columna.
El primer experimento fue ‘First Team: Juventus’, un fracaso narrativo sin estructura, habilidad televisiva, ni emoción. ‘Destino Rusia 2018’ fue el intento de HBO, coincidiendo con el Mundial, con bastante más acierto de guión a la hora de abordar este género. La vinculación temática a un Mundial siempre conlleva una épica más fácil y atractiva. El ‘All or Nothing: Manchester City’ en Amazon Prime Video (heredera de una larga saga de más ‘All or nothing’ de la NFL) tuvo repercusión en España y capacidad de cautivar al espectador gracias al efecto Guardiola. Una tesis doctoral de excepción sobre el técnico sin precedentes. Pero a nivel narrativo, la cotidianeidad futbolística es difícil que resulte apasionante y los clímax de cada episodio se notaban forzados. La serie provocaba cierto tedio después del tercer o cuarto capítulo.
Uno de los estrenos más resultones en el ámbito de las series documentales de fútbol es ‘Six dreams’ (Amazon Prime Video), básicamente porque en su estructura ha incluido una intención narrativa complementaria: centrarse en seis historias con protagonistas muy distintos y hacer que el azar las entrecruce entre ellas.
Los documentales de fútbol son infinitamente mejores cuando se trata de una producción única y el balón se mezcla con aspectos sociopolíticos e históricos. Explicar el fútbol como algo interrelacionado con la sociedad y no como un fenómeno excepcional que se mira al ombligo es, además, bastante más edificante