Mundo Deportivo (Bizkaia-Araba)
Vuelta inesperada y con protagonismo
Berizzo da una oportunidad al meta, que aumentó su rendimiento poco a poco
Nadie, o casi nadie, esperaba semejante golpe mediático en el once inicial de Ipurua: ¡Iago Herrerón,titular! Después de las más que convincentes actuaciones de Unai Simón en su estreno liguero no entraba en las quinielas que Eduardo Berizzo hiciera esta apuesta. El caso es que Iago no era dueño de la portería desde el 4 de febrero de este año en Liga, en el encuentro de infausto recuerdo en Girona. En la Europa League había jugado por última vez el 15 de marzo ante el Olympique de Marsella.
La maldita lesión moderadograve en el tercio distal del músculo bíceps braquial derecho, sufrida en pretemporada ha condicionado de una manera increíble su trayectoria cuando parecía ser el titular por la marcha de Kepa. Y de eso ha pasado algo más de dos meses desde entonces. Su vuelta a la titularidad tuvo de todo, como en botica,si bien con el paso del tiempo su fue asentando hasta ser uno de los rojiblancos con más cuota de participación, señal inequívoca de que el Athletic no funcionó.en especial después del descanso.
No jugaba en Liga desde febrero ante el Girona; pero en marzo ya lo hizo en Europa
Mal arranque
A uno detalles de su especial forma de ver el juego se le sumaron errores gruesos, como una salida en el primer tiempo que dejó desguarnecida la portería. Menos mal que por ahí andaba Yeray para resolver el entuerto. También en un par de salidas del balón conla mano y el pie no estuvo afortunado Iago. Sin embargo,ese toque tan peculiar que tiene para manejar el cuero se dejó notar en el gol de Williams: su largo desplazamiento contó con la colaboración de Aduriz- parece que no llegó a contactar con el esféricopara que el balón fuera el pie derecho del delantero bilbaíno. Además,en el tramo final de este primer acto salvó un disparo de Orellana que olía a gol. Asimismo,un envío con el pie a Williams casi depara una jugada de peligro.
A más
Con la llegada del segundo tiempo la trascendencia de su juego adquirió un mayor peso, señal del penoso rendimiento colectivo. No había ni a quién enviar el balón y cuando lo hacía en largo se veían caras de desaprobación. Unai López pareció recriminárselo en alguna ocasión con los brazos levantados. Lo de tocar en corto no iba con el Athletic de ayer,que dejó ser fiel a su idea de tocar y tocar.
Y de ahí, entre otras cosas, vinieron los agobios, que supusieron una mayor y mejor actividad del meta rojiblancos. Así, Ramis le hizo despejar a córner tras repeler su cabezazo dentro del área. Además una doble intervención hizo que Herrerín justificara la apuesta de Berizzo. El cancebero estuvo, además, raudo en las salidas y por alto anduvo decidido,dando sensación de mando en una zaga que se multiplicó ante la presión local.
Para ser el primer día no estuvo mal el regreso a la titularidad de Herrerín. Ahora se suscita la pregunta: ¿quién será el habitual titular en el marco bilbaíno? La portería sigue dando de qué hablar