UN MOLDE PARA BERIZZO

La fórmula que le ha dado resultado al argentino ha sido la del Camp Nou, Wanda y Villamarín Refuerzo del flanco zurdo, mezcla de músculo y talento en la media y Williams arriba

“El fútbol es así. Lo sabíamos, pero no deja de doler una derrota absolutamente inmerecida, más aún por la dificultad que entraña jugar bien con el equipo intentando salir de los puestos delicados de la tabla”. Así rezaba parte de la crónica oficial del Athletic publicada en su página web. Un resumen perfectamente válido. Parece mentira que la escuadra bilbaína se volviese a casa de vacío después de adelantarse por dos veces en el Wanda Metropolitano.

Ante el áspero Atlético de Madrid sucedió como en aquel chiste en el que se dice que hay una buena noticia y una mala. La buena es que quizás ya está claro el molde con el que Berizzo debe troquelar los partidos de los leones. Como prometió en la previa, con esa mezcla de músculo y creatividad. Blindando más las bandas, siendo más sólidos en defensa -dejando a un lado el balón parado, claro está- y con atrevimiento suficiente con la pelota en las botas propias. Y sumando soldados a la causa, como Núñez, San José o Beñat. Castigo y dolor en el presente, pero quizás una semilla esperanzadora que produzca beneficios en un futuro que, por el bien del club, tienen que llegar a corto plazo.

La mala fue que, al final, en el luminoso de la guarida colchonera quedó fijada una nueva derrota. La función resultó divertida en su desarrollo para los que vistieron de azul el sábado, pero el desenlace fue fatal. Cruel. Con un gol del cojo Godín. Traducido en números, la tropa del argentino se libra por el golaverage de ocupar zona de descenso. Suma los mismos 10 puntos que el Leganés, que sí pisa ese terreno resbaladizo. El balance es deprimente. Una victoria, siete empates y cuatro encuentros perdidos.

Yuri y Dani García

Berizzo utilizó ante Simeone un plan similar al que había desplegado en pasadas salidas, como ante el Betis en el Villamarín o con el Barça en el Camp Nou. Exitosas, pero no al 100% por diferentes factores, como la roja a Susaeta o la irrupción de Messi. Con algún baile de nombres sobre el que habrá que reflexionar. Por un lado, reforzó nuevamente el carril izquierdo. Adelantando a Yuri Berchiche y colocando por detrás en el lateral a un Balenziaga que ha cumplido en sus tres apariciones. Aunque en las citas más inmediatas no podrá contar con el de Zarautz tras ver la quinta amarilla y ser expulsado en el Wanda.

Por otro lado, el de Cruz Alta colocó sobre el tapete del Wanda a San José y Beñat en la medular. Con papeles bien repartidos. El navarro fue un tren de largo recorrido, labor de zapa y, además, con fuerza para sumarse al ataque, como demostró con el tiro que Oblak despejó como pudo pero que Williams remachó sobre la línea en el 0-1. E incluso con alguna llegada por la derecha. Con su rendimiento Berizzo tendrá que pensar lo que hace ahora con Dani García, que se perdió la cita con los del Cholo por sanción y que ha sido un fijo en sus onces.

Mientras, Beñat se ocupó de llevar la batuta, de aportar criterio al juego bilbaíno. Además, mientras San José se proyectaba hacia otras zonas del campo, el de Igorre era más o menos el que guardaba la posición táctica en la medular. Fue relevado en el minuto 67, más porque ya no le quedaba gasolina que por gusto del técnico, que metió a Nolaskoain.

El papel de enganche, o segundo punta, según se mire, 4-2-3-1 o 4-4-2, fue para Muniain, que llevaba dos partidos como suplente. Lo cierto es que no se le vio demasiado, pero sí acertó a dar el pase a Williams, que junto a Susaeta tenía la misión de hacer kilómetros arriba, en el 1-2. Ariete a la carrera con espacios. El cometido que tuvo el diablillo de la Txantrea ante el Atlético, con esa libertad de acción, lo desempeñó Raúl García frente a Betis y Barça.

El centro del campo refleja perfectamente las idas y vueltas de Berizzo. Hace cuatro partidos, ante el Rayo, optó por Dani García, Unai López y Muniain de salida. Sufrió una mutación física en los dos siguientes ante Valencia y Espanyol, alineando a Dani García, San José y Mikel Rico. Para volver un tanto sobre sus pasos con los de Simeone, con San José, Beñat y Muniain. Solución mixta. Es la versión más fiable. Camino a explorar y explotar. Con esa incógnita por despejar. Si es una fórmula solo para esos choques de altos vuelos fuera o también para San Mamés

FOTO: GETTY Con llegada San José volvió a formar de inicio en el centro del campo, esta vez acompañado por Beñat en la creación