Mundo Deportivo (Bizkaia-Araba)
Del Erasmus al milagro del curling español
Oihane Otaegi, Leire Otaegi, Sergio Vez y Mikel Unanue, plata mundial mixta a pesar de los pocos recursos
“Empezamos con escobas muy rudimentarias que comprábamos por internet”, cuenta Oihane Otaegi. Junto a Mikel Unanue, Sergio Vez y Leire Otaegi protagonizó hace unas semanas el último milagro sobre hielo del deporte español. El equipo nacional se proclamó subcampeón del mundo por equipos mixtos de curling, un deporte en el que Vez y su prima Irantzu García ya habían conseguido subir al podio mundial en la modalidad de dobles mixtos en 2014 con un bronce.
Hace poco más de un mes, el equipo español realizó la enésima demostración de que la palabra ‘imposible’ no existe en el planeta deporte. Tampoco en el que ellos practican, con las familias Vez y Otaegi como estandartes en el País Vasco. Sergio se inició en el Ibarpolo de Vitoria a los diez años; más tarde, a los veintiocho, arrancó Oihane en el Txuri Berri, donde dio uso a un material que se había quedado abandonado. Su hermana Leire le ayudó a hacerlo y tiempo después se les unió Mikel, pareja de Oihane.
Aprendieron por su cuenta, hasta que Mikel decidió dar un paso más. “En 2012 atravesaba un momento delicado en el trabajo. Tengo familia en Vancouver y lo vi como una oportunidad para aprender más sobre curling”, relata. Hacia allí se fue. Le gustó tanto la experiencia que repitió dos años después. Mientras, Oihane, Leire y Sergio aprendían por su cuenta y cuidaban los contactos que iban adquiriendo poco a poco en su deporte.
Los recursos no acompañaban, pero ellos tiraban de imaginación en las pistas de hockey hielo y de patinaje de San Sebastián y de Jaca. “La característica principal de la pista de curling es la pureza total del hielo. Tiene que estar totalmente liso, sin rayas”, describe Sergio. Algo imposible de encontrar en España. Por ello, han seguido creciendo hasta poder conseguir escaparse a Suiza, un país puntero en Europa en este deporte, durante algunos fines de semana. Tan solo disponen de entrenador en algunos torneos, como una figura de apoyo. “El trabajo lo hacemos por nuestra cuenta: temas técnicos de línea y equilibrio, suelta de la mano, estrategia, gestión de las situaciones de juego, barrido...”, cuenta Mikel sobre la preparación que sigue el equipo español.
Roles definidos para triunfar
Gracias a su fuerza de voluntad han ido progresando a nivel técnico y estratégico. En este segundo aspecto, Sergio, que es el capitán, plantea los partidos. Él suele montar la guardia durante los primeros lanzamientos; después, todos se turnan en las distintas facetas del juego. “Mikel es nuestro mejor barredor. Y Sergio es quien más desgaste psicológico sufre, porque tiene que estar todo el rato pensando en las jugadas en función de los factores en los que se desarrolla el partido”, explica Oihane. Ella, junto a Mikel y Leire, es quien más estudia las condiciones del hielo para ver cómo puede afectar el barrido al movimiento de la piedra. “Lo malo es que la pista cambia todo el rato. Los mejores equipos son los que mejor se adaptan”, asegura Mikel.
En ese sentido, la adaptación del equipo español durante el Mundial fue total. España acabó primera de su grupo , evitó los octavos de final, remontó contra Alemania en cuartos y derrotó a Rusia desde el inicio en semifinales. En la final cayó por 2-6 contra Canadá. “Jugamos unas horas después de las semifinales y nuestro miedo era el cambio de temperaturas. Cuando pasas del frío al calor muy seguidamente el cuerpo se aploma. Por ello el físico al final acaba marcando la diferencia”, explica Mikel.
No lo descuidaron en una preparación con muchos inconvenientes. Esos entrenamientos físicos se fraguaban entre semana, antes de sus viajes relámpago a Suiza durante los fines de semana para compensar en ellos de forma intensiva todo el trabajo técnico atrasado. “Así, hacer un buen evento como el Mundial es algo que puede salir, pero encadenar Preolímpico, Mundial
Sin entrenador fijo, la imaginación y la autogestión fueron la clave para su medalla
Piden una estructura fuerte para mejorar su preparación y luchar por ampliar sus éxitos
y Europeo para poder acudir a unos Juegos Olímpicos es complicado”, avisa Sergio. “Si nos ayudaran y nos facilitaran los entrenamientos sí podríamos a aspirar a estar de forma sólida entre los mejores”, añade Mikel.
Por ello esperan que su nuevo éxito sirva para dar el impulso definitivo al curling español. Su gran sueño es poder debutar en la cita de los cinco aros, pero son realistas. “Necesitamos tener ayudas”, insiste Mikel. Oihane, Sergio y él saben lo que han tenido que pelear para hacer realidad un milagro que han fomentado con un Erasmus constante tras partir de aquella compra de escobas por internet