El VAR equilibra la balanza del Atlético de Madrid

Jornada tras jornada, la presencia del sistema de videoarbitraje demuestra que el fútbol, a día de hoy, se mide con un poco más de justicia. Si bien es verdad que no es del gusto de todos, y que en ocasiones sigue dejando dudas, no se puede negar que muchas acciones quedaron bien resueltas.

En un mundo ficticio en el que no existiera el VAR, el Atlético de Madrid encontraría el equilibrio después de 14 jornadas de liga, algo que no todos los equipos pueden decir. Después de haber sido más beneficiado que no, en el encuentro ante el Girona se privó de sumar los tres puntos de no haber existido la tecnología. Justo antes de que finalizara el primer tiempo, Christian Stuani fue derribado por Jan Oblak justo en la frontal del área. A pesar de la complicada decisión, Ricardo de Burgos Bengoetxea señaló falta fuera del área, algo que tuvo que corregir su ayudante desde la sala del VAR, que terminó por decretar penalti ya que la acción ocurrió dentro del área. El propio Stuani anotó un gol que, de no ser por el VAR, habría permitido al Atlético de Madrid sumar tres puntos, colocándose tercero en la tabla de clasificación, misma posición y puntos que ocupa a día de hoy con la aplicación del sistema.

Precisamente el Girona, que se vio beneficiado por el uso del VAR, es, de largo, el equipo que más ha celebrado la instauración del videoarbitraje en LaLiga Santander. Actualmente, el equipo de Eusebio Sacristán marcha sexto, con 21 puntos en su haber. Sin embargo, y a pesar de que el VAR le permitió sumar un punto antes los rojiblancos, el Girona es el equipo que más habría sido perjudicado en caso de no tener la ayuda arbitral, ya que en un mundo ficticio el equipo iría decimo quinto, con solo 16 puntos sumados en 14 partidos