Mundo Deportivo (Bizkaia-Araba)
Expediente cumplido
Pese a que el resultado de ida cosechado por el Athletic en esta eliminatoria copera podría invitar al conformismo, lo cierto es que los hombres de Garitano dieron la sensación de estar trabajando ya a medio plazo. Es decir, las bases que el nuevo entrenador rojiblanco quiso establecer fueron fielmente llevadas adelante por un equipo que está necesitado de buenas noticias en forma de resultados.
Mediante la correcta y previsible ubicación que el 1-4-4-2 ofrece, Raúl García y Aduriz formaban por fin juntos en posiciones realmente reconocibles para ellos, mientras los dos exteriores eran para Susaeta y Córdoba, dos extremos de libro. Además, en el doble pivote, ubicación que siempre ha dado sensación de equilibrio en el Athletic, Beñat y Dani García se repartían el trabajo con sensatez para no sufrir demasiado sin balón.
En cuanto al estilo, quizás el primer gol del Athletic podría resumir cómo un equipo del talante de los bilbaínos es capaz de llegar al área contraria con mucha más velocidad de lo que venía ocurriendo hasta la fecha. Aduriz recoge un buen balón largo de Iñigo Martinez y gol con tan solo dos contactos con el esférico.
Sin balón el equipo no sufrió tanto al no tener que saltar demasiado lejos los futbolistas rojiblancos, presionando en primera instancia el balón para pasar a replegarse hasta el círculo central cuando no era posible el robo. Si Raúl García cerraba la salida de un central, Aduriz equilibraba por dentro para evitar el pase interior y viceversa, esto es, movimientos defensivos sencillos y de manual en la combinación de trabajo de la pareja de delanteros. Las ayudas a sus laterales tanto de Córdoba como de Susaeta completaban el resto.
Quizás, por poner algún punto de mejora, hubo momentos en la segunda mitad en los cuales se cometieron algunos desajustes en la línea defensiva que, sin hacer peligrar nunca el resultado, sí ofrecieron la sensación de tener que coordinar mucho mejor las referencias defensivas. A partir de aquí, interesante de nuevo que los hombres gol del Athletic volviesen a marcar para recuperar la confianza de un grupo de jugadores muy necesitados de ello. Un cambio de estilo que es apreciable ya desde el inicio y que puede ayudar sin duda a girar la inercia en la que se había situado el equipo en un primer tercio complicado de liga.
El Athletic tiene capacidad, virtud y ganas de salir de donde se encuentra ubicado, y a buen seguro, que no le quepa la duda a nadie, que se conseguirá sin descanso. Eso sí, quien piense que será fácil, está equivocado y quien crea que es imposible, también. Gaizka Garitano ha llegado para quedarse por mucho que las urgencias clasificatorias inviten a más de uno a no pensar más allá de conseguir los puntos rápido, sea cual fuera la forma. El fin no justifica los medios, pero el equipo de San Mamés y su afición ya son veteranos en cómo conseguirlo...