Las sonrisas vuelven a Lezama

El triunfo ante el Girona eleva la moral y la confianza de los bilbaínos en la habitual sesión de recuperación en las instalaciones rojiblancas

No hay nada como ganar, ese manido mensaje de Gaizka Garitano desde hace unos días, para ser dichosos, para que los rostros irradien felicidad, alegría, una cierta dosis de relajación. Y más si el logro vino precedido de una carga enorme de tensión durante unos 90 minutos ante el Girona que parecían destinados a carecer de premio dada la gran actuación de Gorka Iraizoz con numerosas paradas.

Pero esto es fútbol y el revolcón deparó una euforia en la grada con el tanto de Aritz Aduriz. Este cambio radical se reflejó en el entrenamiento matinal de ayer en Lezama, donde las caras eran otras bien distintas a las que se podían ver tras la debacle ante el Levante en tierras valencianas, preludio de lo que sucedería horas después con la destitución de Berizzo. Aquello fue un disgusto para todos. De hecho, Aduriz reconoció que había pasado la peor semana de su vida.

Williams y Balenziaga

Precisamente Aduriz fue uno de los más fieles exponentes de esa satisfacción en la jornada de recuperación -también Iturraspe refleja en su cara el momento anímico de la plantilla-, en la que se pudo certificar que la recuperación de Balenziaga va por buen camino, ya que estuvo trabajando con el grupo, aunque parece complicado que pueda estar disponible para el encuentro de Mendizorrotza, donde Berchiche se supone que será titular tras cumplir su serie de encuentros por la expulsión ante el Atlético de Madrid en el Wanda Metropolitano cuando el partido había concluido.

Mikel Rico

El que no llegará para esta cita en la capital alavesa, salvo sorpresa, será Rico, cuya lesión en el Teresa Herrera al poco de iniciarse el partido ante el Depor le está dando bastante guerra. Ayer no salió a ejercitarse.

Por cierto, Williams trabajó una vez solventado el golpe que sufrió en un hombro ante el Girona que se quedó en un susto, y que le supuso dejar el terreno de juego cuando se había cumplido algo más de una hora de juego. El delantero rojiblanco sigue sin ver puerta en San Mamés a pesar de que al comienzo del encuentro ante el Girona estuvo a punto de romper esa maldita racha, pero Iraizoz evitó su diana con una estirada espectacular a un disparo cruzado tras un buen pase de Córdoba.

Por grupos

Por lo demás, los titulares trabajaron a menor ritmo en la habitual sesión de recuperación y el resto, con San José, Susaeta y Muniain, que salieron en la segunda parte ante el Girona, se ejercitó por espacio de hora y media, con una serie de partidillos entre otras cuestiones. Garitano siguió de cerca la sesión haciendo hincapié en conceptos básicos

FOTOS: JUAN ECHEVERRÍA La plantilla del Athletic disfrutó ayer de un entrenamiento más alegre tras la victoria lograda el lunes ante el Girona y en el que Balenziaga ya pudo trabajar con el resto del grupo una vez superada su lesión