Cuando perder es una victoria

odavía hay algún hincha rojiblanco que sigue sin creerse que el Athletic está en cuartos de final de Copa. Lo vivido en la tanda de penaltis frente al Elche y durante el desarrollo del encuentro ante el Tenerife invitaron a pensar en más de una ocasión que la presente edición del torneo del KO iba a pasar a mejor vida para los leones en un abrir y cerrar de ojos. Nada más lejos de la realidad, puesto que el bilbaíno fue el primer club en asegurar su presencia en el bombo de mañana. l desarrollo del duelo ante los chicharreros no fue apto para cardiacos. Muchas emociones fuertes, tanto a favor como en contra, en medio de un choque de esos de los que suele decirse que hacen afición. Goles por doquier, emoción, polémica, expulsiones, incertidumbre... Fútbol, lo que se dice fútbol, no tanto; pero a veces no todo se reduce al ‘jogo bonito’. odos los presentes en el campo, ya fuesen blanquiazules o rojiblancos, dieron un unánime y emocionante apoyo a Williams. El racismo y los tontos que se dedican a imitar ciertos sonidos de animales o a insultar por cuestión de piel no tienen cabida ni en el fútbol, ni en el deporte, ni en cualquier otro ámbito. Están de más, sobran. “Todos somos Iñaki”. l comportamiento de la afición local presente en el Heliodoro Rodríguez López antes, durante y, sobre todo, al final del partido es digno de elogio. Aplausos para el ganador pese a ser el de fuera y reconocimiento para ambos. La esencia del fútbol. ¡De chapeau! Bravo por el Tenerife y su hinchada ●