Unicaja rebosa confianza

➔ Los andaluces superan claramente al MoraBanc Andorra y acceden a la final para desafiar el gafe del anfitrión

Andorra casi sin opciones a partir del segundo cuarto. El equipo andaluz, pletórico en carácter y determinación, supo aprovechar esta gran ocasión para plantarse en una final que muy pocos esperaban y que puede arreglar bastante su temporada.

Confiando otra vez en su núcleo de jugadores españoles, con tres canteranos del ‘Estu’, el equipo cajista volvió a ser más brillante y efectivo que su rival, haciendo las delicias de un Carpena a rebosar que vibró como casi no lo había hecho esta temporada. Jaime Fernández hizo frente a las molestias que lleva semanas arrastrando para acabar como líder anotador con 19 puntos, con 15 de Ejim y 14 de Adams de apoyo.

Los referentes del Andorra, en especial Todorovic, que estuvo magnífico en cuartos, se vieron bloqueados ante la especial atención de la defensa rival y no pudieron responder al desafío anotador desde el inicio.

El 20-12 del arranque era prometedor para los andaluces pero el golpe importante lo dieron entre el final del primer cuarto y el minuto 6 del segundo, con un parcial de 22-3 que dejó el partido muy complicado para los del Principado. En esa fase, la conexión BrizuelaFernández-Suárez

resultó demoledora en ataque, situando el marcador en una máxima diferencia de 42-19. Una pequeña respuesta de los andorranos redujo a 18 las diferencias al descanso (48-30).

El MoraBanc sacó a relucir algo de orgullo en el inicio del tercer cuarto y aprovechando una racha de Clevin Hannah se situó a doce (52-40) pero era complicado que el Unicaja se viniera tan abajo. De hecho, los no nacionales también acabaron uniéndose a la buena dinámica con Waczynski y Adams protagonizando canastas que volvieron a distanciar a los suyos hasta el 68-49 del final del tercer período.

En el último cuarto las diferencias superaron ya los 30 puntos para delirio de la afición malagueña, entregada entre gritos de ‘A por la Copa’ y homenajeando también a la hinchada rival.

Los andaluces seguirán, pues, desafiando el maleficio del equipo de casa que no se impone en este torneo desde que lo lograra el Baskonia en el 2002. Esta vez llegan con confianza aunque además de eso será necesario algo de suerte, energía y planteamiento para hacer frente a un Real Madrid que, no lo olvidemos, ha tenido un día más de descanso ●

FOTO: EFE Rubén Guerrero, pívot de Unicaja, expresa su emoción en un lance de la semifinal. El Unicaja puso mucha pasión en el partido y alcanzó su objetivo