Mundo Deportivo (Bizkaia-Araba)
Laguardia, un kaiser con label albiazul
➔ El aragonés cumplió ante el Mallorca su partido número 100 con el Alavés en Primera y es el líder de la zaga en las seis últimas temporadas
➔ Víctor Laguardia sigue labrándose un hueco en la historia de El Glorioso. El pasado sábado, frente al Mallorca, cumplió su partido número 100 en Primera con la zamarra del Alavés, club en el que ha conseguido sus mayores logros deportivos.
Desde que llegó a Mendizorrotza en el verano de 2014, lleva ya seis temporadas siendo el principal referente de la zaga albiazul. “Ojalá podamos tener muchos ‘Victor Laguardia’ en la plantilla, porque él representa los valores del club”, expresó recientemente el director deportivo Sergio Fernández.
Junto a Fernando Pacheco y Manu García integra el trío de supervivientes en la actual plantilla del equipo que logró el ascenso a la máxima categoría en la temporada 1516. Los tres juntos han contribuido a hacer historia en un club que vive una de las mejores etapas de sus 99 años de existencia.
De la mano de Pacheco
El central aragonés tomó en el verano de 2014 la decisión más importante en su exitosa carrera deportiva. Con 24 años, decidió abandonar su casa y el Real Zaragoza, en cuya cantera se formó, para apostar por una nueva aventura en un Deportivo Alavés que, en la campaña anterior, acababa de sellar una agónica permanencia en la División de Plata en la última jornada del curso 13-14.
Gracias al histórico gol de Guzmán Casaseca en el estadio de La Victoria el 7 de junio de 2014, el club gasteiztarra inició el curso siguiente, el 14-15, con el objetivo de asegurar la permanencia de manera más holgada. Para ello, Víctor Laguardia se incorporó como uno de los refuerzos a la plantilla entonces entrenada por Alberto López en julio de 2014. Ese fue el comienzo de una etapa gloriosa que se prolonga hasta nuestros días. En la siguiente temporada, la 15-16, llegaron los éxitos. En agosto de 2015, Fernando Pacheco fichó por el Alavés procedente de la cantera del Real Madrid. Desde entonces, los caminos de ambos se unieron. Junto a Manu García y Gaizka Toquero, entre otros, ambos se convirtieron en dos de los pilares del plantel que, con José Bordalás en el banquillo, lograron subir a Primera División.
Portero y central siguieron caminando juntos y, en la 16-17, alcanzaron la primera final de Copa en la historia albiazul, la segunda gran final del club tras la mítica de la Copa de la UEFA en Dortmund en 2001. En febrero de 2017 club hizo pública la primera renovación de contrato de ambos. Los dos pilares prorrogaban contrato a la vez y se convertían en dos de los estandartes del proyecto de futuro babazorro.
Grave lesión de rodilla
Sin embargo, el fútbol le iba a privar de forma cruel de cumplir su gran sueño. En abril de 2017 Víctor Laguardia sufrió una lesión de rodilla que, a la postre, le impidió disputar la ansiada final de Copa, el que iba a ser el partido más importante de su carrera. Desde entonces, el fútbol tiene una cuenta pendiente con él.
El aragonés estuvo prácticamente nueve meses de baja hasta que, en enero de 2018, frente al Sevilla, reaparecía en el cierre de la primera vuelta liguera del curso 17-18, en el
que el Alavés, que parecía condenado al descenso tras un pésimo inicio, logró salvarse con holgura gracias a una milagrosa remontada desde el desembarco de Abelardo en el banquillo en diciembre.
En esa campaña se convirtió en el principal refuerzo invernal del Alavés. Precisamente en diciembre de 2018, Laguardia celebró su última ampliación de contrato con el Alavés. también la rubricó junto a Fernando Pacheco. Ambos, juntos de la mano, se han mantenido como indiscutibles hasta la fecha y han sido dos de los hombres clave de la exitosa etapa reciente de El Glorioso.
Sin duda, el joven defensa aragonés que fichó en el verano de 2014 por el Alavés, se ha convertido a base de trabajo a sacrificio en el líder de la zaga albiazul, un kaiser babazorro con label albiazul ●