Mundo Deportivo (Bizkaia-Araba)
Concluye una etapa feliz en el Alavés
aunque no ha hecho muchos este año. Puede jugar en banda, arriba. Va a marcar diferencias. Es uno de los jugadores que creo que va a maravillar a San Mamés. Y Nico Serrano, también. Es superexplosivo, tiene la portería entre ceja y ceja. No se lo piensa a la hora de encarar, tiene un desparpajo increíble a la edad que tiene. Son dos jugadores que hay que tener en cuenta porque han hecho una temporada extraordinaria y porque tienen unas condiciones de Primera División.
¿Y al primer equipo cómo le ve?
Le veo muy bien, es una lástima que se haya parado todo esto. Es un año precioso con la final. Ahora está con la incertidumbre de lo que va a pasar. El otro día vi la Bundesliga y es un poco surrealista, sin público. Parecen entrenamientos. Estaban en una dinámica buena, la Copa les había desgastado, pero ya en el arreón final, que suele ser el de los 10 o 12 últimos partidos, todos van a apretar. Coincidió con Garitano hace años. ¿Se le veía madera de líder para ser entrenador?
No lo sé, pero en la posición en la que jugaba tenía liderazgo. Era pivote. Tenía carácter, tenía ese liderazgo para colocar a sus compañeros, porque en esas posiciones se necesita ese tipo de jugadores, que sean comunicativos. Aparte de eso, era un apasionado del fútbol. Me acuerdo de que vivía desde pequeño el fútbol. Lo tiene en los genes. Ha sido increíble toda su carrera: en el Eibar hasta el Valladolid. Ha llegado hasta aquí y triunfando, y me alegro muchísimo de que todo le vaya bien tanto a él como a Patxi Ferreira ●
“Han sido dos años muy bonitos, muy intensos, y decidimos no continuar, aunque había posibilidades. No ha habido ningún problema, he quedado con la puerta abierta como dijo Sergio Fernández”. Javi González explica así su marcha de Gasteiz tras una grata experiencia. “Estoy muy agradecido al Alavés por haber confiado en mí estos dos años. He intentado formar a los jugadores, como futbolistas y personas. Estoy muy orgulloso”.
El de Zorroza recuerda que “nos hemos quedado a diez partidos para el final de la Liga y el equipo estaba muy bien, mejorando mucho” y lamenta que “ha sido difícil de golpe y porrazo parar y ver que se para el mundo”. Llamadas, trabajo individual, psicológico... han compuesto su menú en el confinamiento para dirigir a sus chicos. “Estamos en Liga Vasca y hemos ascendido a Liga Nacional. Han competido muy bien, han quedado campeones, el menos goleado y el máximo goleador”, precisa.
“He estudiado mucha psicología, es muy importante. Los cursos los tengo todos. Soy un apasionado de la formación de los niños y del fútbol profesional”, asegura. ¿Y está preparado para dirigir profesionales? “Sí, pero no digo que sea uno de mis objetivos ahora mismo”, dice ●