Mundo Deportivo (Bizkaia-Araba)
“Ya no veíamos el momento”
➔ Las traineras muestran todas sus ganas en la primera sesión en el agua para preparar una temporada que comenzará el 4 de julio
➔ Después de casi tres meses de confinamiento, el de ayer era un día señalado para las traineras vascas, que pudieron completar su primera sesión preparatoria en grupo y en el agua, paso imprescindible para que las competiciones arraunlaris puedan ponerse en marcha el primer fin de semana de julio, en lo que se refiere a la Eusko Label Liga y la Liga Euskotren.
Entre las 6 y las 7 de la tarde se pusieron en marcha la mayor parte de las traineras vascas de la máxima categoría, con las medidas de seguridad necesarias. Por ejemplo, clubes que tienen botes en la Eusko Label Liga, la Liga Euskotren y la ARC, como Orio y Donostiarra, apostaron por una salida escalonada al agua para evitar la coincidencia de todos sus deportistas en el mismo espacio.
Las mascarillas también tuvieron su protagonismo, así como los aparatos de desinfección de botes y remos. Así, se pudo ver a cuadrillas como las de Zierbena, Urdaibai o Santurtzi cumpliendo con las medidas establecidas para esta primera sesión en el agua. A la Sotera le siguió a una distancia prudente un grupo de seguidores en el puerto. Poco a poco bajaron por la rampa y se introdujeron en el bote, esperaron a la zodiac y dieron las primeras paladas. En busca de la remada necesaria para ponerse a punto.
Lo mismo en el vecino municipio de Zierbena, donde tras los ejercicios en tierra llegó el turno del agua. “Estamos con ganas, ahora tendremos que ver cómo nos adaptamos después de todo el trabajo de invierno en el ergómetro”, reconocía el técnico de los galipos, Juan
Zunzunegui, en declaraciones distribuidas por la Eusko Label Liga.
El pero fue que el día no acompañó en lo climatológico. No parecía junio: “Hemos estado todo el confinamiento con buen tiempo y ahora está el mar un poco movido, pero por lo menos podemos salir al agua y nos queda un mes para empezar la Liga, así que bien”, afirmaba el preparador gallego.
Zunzunegui, eso sí, pedía calma y decía que esta etapa hay que afrontarla con mucha cabeza: “Ahora todo el mundo piensa que qué emoción, que por fin al agua, pero digamos que esta semana no es la semana de meter las ganas en el agua, es la semana de tocar, de tener cuidado, de ir cambiando del ergómetro al agua, pero tampoco puedes dejar ahora de trabajar todo lo del ergómetro y pasar directamente todo al agua, porque entonces el cuerpo se va a resentir, las manos, el culo, los movimientos... habrá que ir intercalándolo y esperemos que en 10 o 15 días ya se pueda empezar con la dinámica que sería normal de agua”.
Otro de los remeros del bloque galipo, Endika Morán, expresaba su satisfacción por esta primera sesión en grupo: “Desde la segunda semana de marzo que no salíamos al agua, casi después de tres meses, ya no veíamos el momento. Después de no saber si íbamos a salir en verano, ahora ver que se sale al agua es una alegría y juntarse con los compañeros también ayuda”.
Y es que la etapa de confinamiento ha pesado: “Ya tenía la cabeza muy saturada con tanto ergómetro, solo ver la pantalla, ya era un comedero de cabeza enorme; venir aquí ya es una liberación grande” ●