Mundo Deportivo (Bizkaia-Araba)
Dos años sin Kepa bajo la portería rojiblanca
➔ Mientras el de Ondarroa pasa por horas bajas en el Chelsea, Unai Simón se consagra como un meta de futuro
➔ Ayer se cumplieron dos años de la confirmación oficial del fichaje de Kepa Arrizabalaga por el Chelsea. Y un día tal como hoy de 2018, el joven portero de Ondarroa realizaba su primer entrenamiento con el conjunto londinense, que había pagado la friolera de 80 millones de euros al Athletic por hacerse con los servicios del que apuntaba a ser un guardameta de referencia a nivel continental. Dos años después, el Chelsea no ve el momento de darle salida y recuperar al menos parte de la elevada inversión que realizó. Y es que nadie podía imaginar que el fulgor de su irrupción en el exigente fútbol inglés se apagara tan pronto. Del mismo modo que nadie podía pensar que se le iba a echar tan poco de menos en Bilbao en este tiempo que ha transcurrido desde su marcha.
La efeméride de su contratación por parte del Chelsea era recordada ayer profusamente en redes sociales. En muchos casos, en tono de burla. Y es que este segundo aniversario de su fichaje coincidía con el partido que ayer jugaron los ‘blues’ contra el Bayern de Münich en el Allianz Arena. Como era de esperar, Kepa quedó una vez más relegado al banquillo, mientras que el veterano Willy Caballero (38 años) se situaba bajo palos. Tampoco lo pasó bien ayer el argentino, que encajó 4 tantos ante los bávaros (4-1).
Tras una primera temporada en Londres que puede calificarse de buena, el calvario para Kepa comenzó en su segundo curso. Una serie de errores de bulto hicieron que Frank Lampard perdiera la confianza en él. El técnico no se ha cortado demasiado a la hora de criticar al meta vizcaíno, lo que le dejó aún más expuesto a la ira de los aficionados o a las bromas, más o menos hirientes, sobre su valía. Esos 80 millones de euros fueron la cantidad más grande pagada en la historia por un portero. Una etiqueta que, por lo visto, ha acabado pesándole demasiado.
Mientras en el Reino Unido y en media Europa ‘vacilan’ con Kepa, en Bilbao ha ido ganando enteros la sensación de que, al final, su marcha al Chelsea fue un buen negocio. No parecía así hace dos años, cuando a la mayoría de la afición rojiblanca le invadía la sensación de que se iba alguien que podría haber hecho historia en el Athletic. Con una escueta trayectoria como león de 54 partidos oficiales en dos campañas, Kepa había despertado una ilusión inusitada en la parroquia de San Mamés. Por sus condiciones, su planta... Incluso llegó a ser comparado con el mítico Iribar. Palabras mayores.
Su marcha hizo pupa, porque respecto a las salidas anteriores de jugadores como Javi Martínez, Fernando Llorente o Ander Herrera, Kepa Arrizabalaga añadía un factor diferencial: era un genuino producto de la cantera de Lezama y además, vizcaíno de pura cepa. Eso, sin obviar que dejaba un poso de incertidumbre sobre cómo quedaría la portería rojiblanca, que parecía blindada por muchos años con su irrupción. Por si fuera poco, el mismo día que el ondarrutarra realizaba su primer entrenamiento como jugador ‘blue’, su relevo, Iago Herrerín, se lesionaba en una sesión en Lezama. En estas circunstancias, a Álex Remiro se le presentaba para debutar como león. Pero, en su pulso con la directiva por la renovación, no contó con una variable inesperada: la de Unai Simón.
El Athletic se movió rápido y repescó al cancerbero alavés, que había sido cedido al Elche. Sorprendentemente, incluso para él mismo, Berizzo le alineó como titular en el primero partido de la Liga 2018-19 frente al Leganés. Y aunque perdería puntualmente el puesto en beneficio de Herrerín, Simón acabaría cuajando y convirtiéndose en el inquilino de la meta bilbaína. En estos dos años, ha demostrado de sobra hechuras de gran guardameta. Y ha hecho olvidar a Kepa. El debate a día de hoy es si Simón es mejor que el ondarrutarra. No importa demasiado. Lo realmente relevante es que la portería del Athletic, esa posición con tanta leyenda detrás, está muy bien cubierta. Y por muchos años, esperemos ●
Ayer, Arrizabalaga volvió a ser suplente en el duelo contra el Bayern de Münich