El orgullo de Bilbao

acía tiempo que el Athletic no daba una alegría así a su sufrida afición. Desde el 5 de marzo, antes del confinamiento general por la pandemia del coronavirus, con aquel sudado pase a la final de Copa en Los Cármenes. Ya ha llovido desde entonces. fuera, eso sí, menos que de puertas hacia dentro. Este triunfo ante el Real Madrid llega con un nuevo entrenador en el banquillo rojiblanco. Marcelino, caballeroso, volvió a agradecer públicamente el trabajo llevado a cabo por Gaizka Garitano y los leones que ya no siguen en la disciplina de la entidad de Ibaigane. esulta merecido incidir en este aspecto, aunque ayer fueran otros los que tuvieran que ganarse a ras de césped el pase a la final de una Supercopa que, ahora sí que sí, va a disparar la ilusión en Bilbao. Ya era hora. Demasiado tiempo sin disfrutar de algo así. ecuperar en condiciones para afrontar el envite ante el Barça es lo primero. Los azulgrana vienen de darse una buena paliza para poder tumbar a la Real. Otro duelo más frente a los culés, el segundo de enero, y que no será el último de este primer mes de 2021 para los leones puesto que el 31 toca visita liguera al Camp Nou. tra competición, en cualquier caso, otra historia. Ahora es momento de disfrutar de lo vivido ayer noche en Málaga. Nunca es sencillo eliminar al Madrid y menos todavía en un cruce a cara o cruz. Raúl García, que en el último duelo ante los blancos fue expulsado en torno al minuto 10, se sacó la espinita. La final espera ●