Mundo Deportivo (Bizkaia-Araba)
Escribá, con la base de la idea de Almirón
➔ En su reestreno ante el Eibar, pocos cambios
➔ Fran Escribá regresó al Elche con un triunfo el pasado sábado ante el Eibar (1-0) y lo hizo sin que aconteciese una revolución respecto a lo que se había visto en los últimos partidos con Almirón al mando.
El técnico valenciano apostó por el mismo dibujo táctico que había utilizado el argentino tanto ante el Villarreal como frente al Celta en el que fue su último partido al frente de la nave franjiverde: el 4-4-2.
De hecho, en cuanto a nombres solo hubo tres modificaciones: la in- clusión de Barragán en el lateral de- recho en detrimento de Cifuentes, la de Dani Calvo, que marcó en una jugada a balón parado, por Diego González en el centro de la zaga, y la de ‘Tete’ Morente en lugar de Josan por banda derecha.
No obstante, sí cabe puntualizar que frente al Eibar se vio que el bloque defensivo del Elche fue algo más bajo. Probablemente, también condicionado por el juego del Eibar.
Falta por ver si mañana ante el Barça (19.00 horas) Escribá sigue con el 4-4-2 o prescinde de Carrillo o Boyé, integrantes de la dupla en ataque para fortalecer la defensa o el centro del campo ●
ZARAGOZA - El Alcorcón asaltó ayer La Romareda gracias a un desgraciado autogol del portero del Real Zaragoza, Cristian Álvarez. El equipo madrileño se llevó el duelo vital de la zona baja logrando tres puntos de oro en su lucha por continuar en la categoría de plata propinando así un doble golpe al equipo maño, por un lado por la victoria y por otro por resarcirse de aquel infausto partido de la primera vuelta que acabó en empate, pero que una alineación indebida de los alfareros supuso la derrota en los despachos. Los madrileños lograron su segunda victoria consecutiva y se ponen con los mismos puntos, 26, que el equipo que marca la salvación, el CE Sabadell, mientras que los aragoneses quedan a solo uno del descenso. El encuentro se decidió en el 65’ en un fallo del meta Cristian Álvarez a la salida de un córner. El argentino no solo no fue capaz de despejar de puños sino que acabó metiendo el balón en su portería ●