Mundo Deportivo (Bizkaia-Araba)
Aspas mete al Alavés y a Abelardo en un brete
➔ El Celta decidió el partido en apenas 20 minutos y luego resistió tras la roja a Murillo
➔ Si el Deportivo de Alavés quiere seguir en LaLiga Santander la próxima temporada, este no es el camino. El equipo babazorro dejó una imagen muy mala en la derrota frente al Celta de Vigo (1-3), que los pasó por encima en los primeros 20 minutos y luego no sufrió a pesar de jugar largo tiempo con un jugador menos por la expulsión de Jeison Murillo. Un resultado que deja muy tocado al Pitu Abelardo, que no consigue darle la vuelta al equipo y ahora encima arrastra problemas con algún jugador de la plantilla, como Lucas Pérez.
El responsable del descalabro fue el propio Alavés, pero también Iago Aspas. El de Moaña castigó dos pérdidas de los vascos a los pocos minutos para encarrilar el partido. Primero fue una falta de entendimiento entre Pachecho y Lejeune la que acabó en el tanto de Nolito (8’), asistido por Aspas, y ambos intercambiaron papeles acto seguido en un robo sobre Pellistri (15’).
La reacción de los de Abelardo fue nula. Solo un disparo de Rioja en una jugada aislada que sacó con acierto Iván Villar, insuficiente para meter el miedo en el cuerpo al Celta. Peor se puso la cosa cuando Aspas, conduciendo una veloz contra, dejó en jaque a la defensa del Alavés para asistir a Mina, que sentenció el partido (20’). Una llamada de atención para Luis Enrique una semana después de evidenciar que la selección necesita algo más en la punta del ataque. Diez goles y diez asistencias en 25 partidos es algo a tener en cuenta.
Tan poco le gustó lo visto a Abelardo que a la media hora decidió sacar del campo a Rioja y Duarte para buscar un golpe de efecto. Por fuerza mayor se debió tratar el tema de las pérdidas al descanso, pero no debió de tomar nota la defensa del Alaves porque solo pisar campo Lejeune intentó una temeraria ruleta en su frontal, Nolito se la quitó y estrelló el balón contra la madera tras rechazar Pacheco el disparo inicial de Santi Mina.
Pintaban bastos la segunda parte también para los babazorros, pero Jaison Murillo les quiso echar un cable y se autoexpulsó en una entrada impropia de un jugador de su experiencia que le costó la segunda amarilla (54’).
Jugar con uno menos cambió las tornas. El Alavés pasó a tener la iniciativa, pero con mucha menos habilidad para generar ocasiones que su rival. Tuvo que ser en balones centrados como encontró la respuesta Abelardo. En uno de ellos Lejeune se topó con un paradón de Villar, que casi detiene la siguiente del central. Puso la mano arriba, el balón fue al larguero y en el rechace marcó Lejeune remachando como pudo (87’), pero ya sin tiempo para lograr algo más.
El Pitu podría ser cesado por los malos resultados y el ambiente que rodea al equipo