Mundo Deportivo (Bizkaia-Araba)
Subidón copero, resacón liguero
Una pena. El partidazo histórico jugado el pasado miércoles en San Mamés ha traído las previsibles secuelas. La prórroga ante el Barça ha costado dos puntos en Cádiz.
El Athletic fue un equipo plano en el Nuevo Mirandilla, sin ideas ni chispa. Ni siquiera chutó a puerta, pero que nos quiten lo “bailao”. Ya lo dicen las madres, “noches alegres, mañanas tristes”. Y la noche del miércoles en Bilbao fue de las más alegres que se recuerdan. Háganse a la idea de lo que tocaba en Cádiz. Qué rabia, escribir de un partido soso a rabiar, insulso, seco, viniendo del paraíso blaugrana. Ni un chut a puerta. Como para batir a todo un Conan.
La exhibición de juego ante el Barça, con 29 disparos buscando a Iñaki Peña, dio paso a un absoluto secarral de oportunidades en el Nuevo Mirandilla. El equipo desatado del miércoles mostró menos ritmo en la Tacita de Plata que el conejo enemistado con Duracell.
Parecían otros, y lo eran. Nada menos que siete cambios en las filas rojiblancas. Y se notó, vaya que se notó, pero no para bien. La frescura de los secundarios no fue suficiente ante unos gaditanos que se juegan la permanencia y estrenaban a Pellegrino en el banquillo. Y con los titulares, en la segunda parte, parecido.
El equipo que Valverde intentó refrescar estuvo plano, ramplón, jugando al trantrán. El refresco que necesitaban los rojiblancos sobre el césped es el que te da alas, pero el camión de reparto no llegó. Herrera y Vesga naufragaron y fueron incapaces de gobernar la medular ni de conectar con los puntas. Iñaki, tras su partidazo copero, sucumbió al cansancio. Solo Simón, los centrales y Adu Ares merecieron el aprobado.
El retorno de Yeray fue lo mejor. Por lo menos, se sumó un punto y se dejó la portería a cero. La pena fue constatar que cualquier versión del Athletic de esta Liga hubiera goleado a los gaditanos sin el lastre de la Copa. Es lo que tiene disputar dos competiciones a tope. Y la temporada que viene tendremos tres, esperemos. El calendario pasó factura, inflexible ●