Mundo Deportivo (Bizkaia-Araba)
Operado de los nervios
➔ Berenguer entra en el once por la ausencia de Nico y decide de penalti
➔ El juego del gato y el ratón con Nico Williams. Sin dar pistas al rival hasta que no hubo más remedio. El extremo no estaba para nada. Ni siquiera para un rato. Viajó con toda la expedición a Madrid, pero se quedó fuera de la convocatoria definitiva por las molestias que arrastra desde el duelo con el Mallorca. Su hueco en el once fue para Berenguer y el destino le guardaba la mejor de las alegrías. Suyo fue el único gol de la noche en el Metropolitano, el que acerca al Athletic a la final de Sevilla.
No es el navarro un jugador demasiado participativo. Aunque cuando emerge, lo hace de verdad. La tensión que se mueve a su alrededor es como si no fuera con él. Está operado de los nervios. Sangre fría. Algo que el Athletic agradeció para decidir frente al Atlético desde el punto de penalti. Una falta de Reinildo sobre Prados al borde del área y de la roja directa. En el verde no estaba Vesga, especialista habitual. Los dos últimos lanzamientos habían salido rana. Uno de ellos precisamente contra los colchoneros. Sancet no acertó con la portería. El siguiente se lo adivinó Valles a Guruzeta.
Esa historia no iba con Berenguer. Agarró el esférico y engañó a Oblak para gozo de la afición del Athletic, que se mordía las uñas. Aunque el extremo está acostumbrado a convivir con la presión. También lo convirtió en el descuento ante el Celta en medio de la locura de San Mamés para el 4-3. ‘San Penalti Copero’ será denominado el 7 de febrero a partir de ahora. Por el de Berenguer y por el triunfo del Femenino en una agónica tanda en la Copa de la Reina.
Valverde movió ficha antes del descanso e intercambió las bandas del 7 y de Iñaki y, desde la diestra, el de Barañain probó fortuna con poco ángulo. No consiguió sorprender a Oblak. Tras el descanso tocó sufrir y tratar de estirar lo máximo al equipo. Berenguer, que se había perdido los últimos encuentros por un esguince de tobillo, mordió y presionó hasta que le llegaron las fuerzas. Su última acción fue una falta contra la barrera que acabó en córner. Hubiera sido idílico clavarla. 0-1 y San Mamés decidirá el finalista
Los leones habían fallado sus dos últimos penaltis y Berenguer atinó con el del Celta