Empieza lo bueno

Al Athletic le espera una semana de órdago. Betis hoy, Atlético de Madrid el jueves y Barça el próximo domingo. Dos partidos importantes en Liga y uno trascendental en Copa. El encuentro de esta tarde, eso sí, será el único del trío que se dispute en campo contrario. El Villamarín pasa por ser un estadio que no se le da nada bien a los leones de un tiempo a esta parte en lo que a la Liga hace referencia (en Copa se clasificaron para la semifinal de la temporada 202021 en la tanda de penaltis). La última victoria bilbaína allí se remonta a finales de diciembre de 2017 con Kuko Ziganda como míster. Casi nada.

Una cita complicada la de esta tarde porque los de Pellegrini vienen de caer en la Conference y saben de antemano que derrotar al Athletic supondría para ellos ascender a la sexta plaza a costa de la Real y volver a meterse de lleno en la zona europea. No se trata, por tanto, de un compromiso más para los verdiblancos, aunque de moral no anden sobrados. Su habitualmente entusiasta afición tampoco pasa por su mejor momento anímico.

Partido importante, por insistir que no quede, para el Athletic. Los leones han sabido hacerse fuertes, muy fuertes, en San Mamés, pero cuando les toca hacer las maletas, en Liga al menos, no se comportan al mismo nivel. Sus últimos desplazamientos en este torneo han sido más bien decepcionantes, pese a no haber perdido.

A Valverde y sus pupilos les espera, en definitiva, una semana de aúpa. Hoy toca la primera parada en el Villamarín. Se trata, sobre todo, de no fallar porque empieza lo bueno