Mejor, casi imposible

Ayer hubo 17.848 socios del Athletic que celebraron por todo lo alto el sorteo de entradas para la final de Copa llevado a cabo por el club rojiblanco. Otros 24.423, sin embargo, se quedaron con la miel en los labios. Estaba claro que de los 42.271 inscritos, más de la mitad no iba a tener premio.

Resulta interesante definir también qué es lo que entienden algunos como premio, puesto que el precio de estas localidades oscila entre 40 y 220 euros. La Cartuja no es además el mejor estadio para seguir de cerca un partido de fútbol. Puede darse el caso de que algunos afortunados acaben echándose para atrás cuando sepan dónde está y cuánto cuesta su asiento.

Guste o no, la final de Copa no está concebida para todos los públicos. Como el fútbol en general. Lo de los precios es una locura a nivel de entradas, de hoteles y de medios de transporte. Lo de tener una sede fija en Sevilla a lo mejor no es tan buena idea como quisieron vender algunos hace ya un tiempo.

Importante y meritoria labor la llevada a cabo por la directiva de Uriarte ,con todos los profesionales del club incluidos, a la hora de ir perfilando y resolviendo los siempre espinosos asuntos organizativos que surgen en torno a una final. Las cosas como son. Mientras a algunos les pueden las prisas, desde Ibaigane se trabaja sin prisa pero sin pausa para ir resolviendo todo tipo de inconvenientes. A hora sólo queda avanzar avanzando, eludir nuevos contratiempos y, sobre todo, esperar que los leones cumplan con su cometido ante el Malloca. Casi nada ●