Acelerón antes del parón

Centrado y concentrado. El Athletic tiene que estar muy atento a lo que se celebra esta noche en San Mamés. La final de Copa y la espantada de internacionales con motivo del nuevo parón de selecciones quedan relegadas a un segundo plano estando de por medio la posibilidad de recuperar la cuarta posición.

Un derbi siempre es un derbi y el Alavés se presenta en Bilbao en uno de sus mejores momentos de la temporada. El trabajo de Luis García Plaza están dando sus frutos y el conjunto babazorro resulta a estas alturas de competición mucho más sólido y consistente que cuando visitó este mismo campo en octavos de final de Copa. Aquella noche Villalibre y Agirrezabala hicieron la diferencia.

Ahora el escenario es el mismo, pero el Alavés no. El Alavés llega con todo esta noche, no como en el torneo del KO cuando su entrenador aplicó una rotación masiva. Hasta ocho cambios introdujo entonces el técnico babazorro.

Resulta necesario, por insistir que no quede, estar a lo que se celebra. Los pupilos de

Valverde tienen que dar el último acelerón antes del nuevo parón para dejar patente que la Copa sí, pero la Liga también. Hay partido.

Todo el respeto del mundo, por tanto, a un Alavés con oficio, sumamente competitivo y que sabe a lo que juega. A los leones les ha ido bien siendo fieles a su estilo en San Mamés. Cuánto más tralla a su fútbol, mejor que mejor.

Otra oportunidad, en definitiva, para dar un pasito en firme en la lucha por una plaza europea y, a poder ser, en la Champions. La final puede esperar. Hoy Alavés, sólo Alavés