El Eibar convierte en costumbre regalar puntos
Ante Deportivo, Málaga, Osasuna y Espanyol el equipo comenzó ganando, pero sólo pudo sumar un punto
El Eibar dejó escapar en Cornellà-El Prat dos puntos que le hubieran permitido resarcirse de la derrota del lunes ante Osasuna en Ipurua, además de situarse con 14 puntos, a uno de Europa y seis por encima del descenso. Sin embargo, esos tres goles encajados en menos de media hora prolongan el mal sabor de boca una semana más, a la espera de que el domingo al mediodía puedan desquitarse frente al Villarreal.
No es la primera vez que esta temporada el Eibar deja escapar una renta favorable. De hecho, comienza a ser algo que pasa con la suficiente asiduidad como para que adquiera algo más que la categoría de casualidad. Con algunos de esos puntos que ha dejado escapar, el equipo estaría ahora mismo en la zona alta de la tabla. Sólo cabe esperar que en un futuro no haya que echarlos de menos.
Todo comenzó en Riazor
Ya en el primer partido de Liga, en Riazor, el Eibar dejó escapar un resultado favorable de manera lastimosa. Ante el conjunto de Gaizka Garitano, Ramis logró poner por delante a los armeros en el minuto 55. Sin embargo, dos goles de Mosquera y Lucas Pérez, de penalti, propiciaron la remontada local en los minutos finales.
En la quinta jornada, en La Rosaleda, Nano Mesa puso por delante al Eibar al filo del descanso. Sin embargo, la alegría le duró poco al conjunto guipuzcoano porque apenas dos minutos después Sandro hacía la igualada. En la segunda mitad, y cuando el encuentro parecía dirigirse a un irremediable empate, apareció En Nesyri para marcar y mandar de vacío a casa al conjunto armero.
Ante Osasuna, el Eibar también comenzó ganando gracias al tempranero tanto de Gonzalo Escalante. Era la situación idónea: un gol a las primeras de cambio ante el colista parecía anunciar una goleada que no se produjo. Todo lo contrario. En apenas media hora el conjunto de Enrique Martín Monreal anotó dos goles que pusieron por delante al conjunto navarro y ni el tanto de Sergi Enrich al filo del descanso impidió que en la segunda mitad Roberto Torres anotara un tercer gol que dejaba a cero a los armeros.
Y el último ejemplo sucedió el sábado. Kike puso el 0-3 justo antes de irse al descanso. En la reanudación, pese al empuje espanyolista, daba la sensación de que los de Mendilibar tenían el encuentro controlado. Sin embargo, el tanto de Hernán Pérez en el minuto 64 dio inicio al descalabro azulgrana. Rápido llegó el segundo de Piatti y, pese a quedarse con 10 jugadores por la expulsión de Caicedo, Leo Baptistao fue capaz de lograr el empate en el minuto 92 que privaba a los armeros de una victoria que tenían en el bolsillo a menos de media hora para la conclusión.
En definitiva, y repasando estos partidos, vemos que el Eibar se ha dejado por el camino entre cinco y 11 puntos que le tendrían en una situación bien distinta. Su fragilidad defensiva y su incapacidad para gestionar resultados favorables han hecho que el equipo esté ahora en una zona intermedia, pero con la sensación de haber regalado demasiado