“Hacienda somos todos, Cristiano paga ya”
El gol de Ramos apagó a una grada que se burló de CR, vibró con Iniesta y realizó un mosaico espectacular
La afición del Barça nunca falla en las grandes citas. Y ayer no fue una excepción. Pese a lo inusual del horario para tratarse de un Clásico, hubo ambiente en los aledaños del Camp Nou desde media mañana. Estaba claro que no era un partido cualquiera y se palpaba la tensión desde muchas horas antes del encuentro.
Al final acudieron al Camp Nou 98.485 espectadores, la mejor entrada de la temporada. Todos ellos colaboraron en la elaboración de un mosaico espectacular. Si hace ya muchos años la afición azulgrana fue pionera en Europa en la creación de grandes mosaicos, ayer volvieron a crear tendencia con un mosaico en movimiento, ejecutado con gran coordinación por parte de las tres graderías, una vez más bajo la batuta de Jordi Sant. El de ayer además del mensaje de Força Barça incluyó una imagen de unos ‘castellers’.
Controles de seguridad
Unos minutos antes de la elaboración del mosaico y de empezar el partido, se veían aún muchos asientos vacíos. El motivo, las medidas de seguridad excepcionales que rodearon el Clásico de ayer, que originaron largas colas en los accesos del Camp Nou.
El primer susto se lo llevaron al conocer la alineación inicial, ya que todos los seguidores llegaban convencidos de que Iniesta iba a reaparecer como titular. La ausencia del manchego y una primera parte bastante discreta minaron la moral de algunos, pero la Grada d’Animació contagió al resto y el Camp Nou no dejó de animar al equipo en ningún momento durante 90 minutos.
A la espera del gol y del buen fútbol, la grada la tomó en la primera parte con Clos Gómez y se ensañó especialmente con Cristiano Ronaldo. El portugués fue el destinatario de la mayoría de insultos y cánticos de la grada. Como era previsible, la noticia del día también estaba muy presente en el ambiente. Se burlaron del portugués, al que se le cantó “Hacienda somos todos, Cristiano paga ya”, además de una pancarta en las zonal del Gol Nord que decía “Ronaldo es tan madridista que blanquea hasta el dinero”.
La primera gran alegría de la tarde llegó cuando salió a calentar Andrés Iniesta, una salida casi tan celebrada como un gol, Había muchas ganas de volver a ver al manchego, que celebró el gol de Luis Suárez en la banda cuando estaba a punto de entrar al campo. El tanto del uruguayo y la entrada de Iniesta cambió el panorama por completo.
La gente se olvidó de Cristiano, incluso de Clos Gómez pese a alguna decisión discutible y se dedicó a disfrutar del Clásico y de lo que parecía iba a ser nueva victoria sobre el Real Madrid. Llegó entonces el turno de los homenajes. Además de recibir a Iniesta con una de las mayores ovaciones que se recuerdan, se corearon los nombres de Luis Enrique y de Leo Messi. La segunda parte no tuvo nada que ver con la primera y la grada se lo pasó en grande.
La mejoría tras el descanso no evitó el sufrimiento final y los últimos minutos se hicieron interminables para los seguidores del Barça, especialmente en cada posesión banca o tras una clara ocasión de Cristiano en el 88’ que a punto estuvo de provocar algún amago de infarto. Hasta que llegó el ‘clásico’ gol de Ramos en el último minuto. Un final que tantas veces se ha visto y que supuso un jarro de agua fría para una afición que ya celebraba la victoria
Abonados al empate Por tercera jornada seguida, el Barça empató. Sucedió ante el Málaga, en Anoeta y ayer. Seis puntos que les harían líderes
Fuerza Chapecoense El detalle más bonito del partido. Aparcaron la rivalidad y se mezclaron blancos y azulgrana para mostrar su pésame y solidaridad
98.485 espectadores acudieron al estadio, la mejor entrada de la temporada