Sin secretos entre dos vecinos
El Athletic-Eibar de esta tarde, marcado por las significativas ausencias de Aduriz y Raúl García, apunta a ser un derbi a tumba abierta
Apenas 40 minutos, 48 kilómetros y medio exactamente separan las dos villas, Eibar y Bilbao. En términos futbolísticos siempre fueron primas, que no hermanas. Aunque sus caminos nunca tuvieron demasiado que ver, al fin y al cabo el Athletic es un clásico y el Eibar un advenedizo en Primera. La cohesión geográfica les une, lo que provoca que en el interior de Gipuzkoa haya simpatía para con los rojiblancos. Son vecinos. Y en asuntos de palacio es mejor que reine la cordialidad, no sea que el día de mañana haya que dejar las llaves en la casa de al lado. Tampoco habrá secretos en la junta de esta tarde, cuyos pronósticos apuntan al fútbol norteño de toda vida, jugado a tumba abierta.
Como quien dice, es un duelo euskaldun recién nacido en el fútbol de máximo relumbrón. La de esta tarde será su quinta edición. En San Mamés la tercera. Un empate a cero y un 5-2 a favor del Athletic componen los antecedentes. Pero sabido es que el fútbol es amnésico y titubea cuando se le pregunta por el pasado.
El majestuoso campo bilbaíno será un escenario de alto voltaje a tenor de los dos estilos y de la clasificación. Athletic y Eibar son el octavo y séptimo del ranking liguero y les separa un punto. Acechan posiciones europeas, si bien es el hábitat deseado por los bilbaínos y una especie de nube para los guipuzcoanos, conformes con seguir distanciados del barro.
José Luis Mendilibar fue en su día entrenador del Athletic y conoce cómo se las gastan los rojiblancos en San Mamés. La intensidad y el juego directo son alfa y omega en Bilbao. Para contrarrestarlo, parece que el técnico del Eibar no cambiará los apuntes de su cuaderno: ojo por ojo, diente por diente y a jugar en terreno enemigo. Iván Ramis es la única ausencia del Eibar. El central se cayó de la convocatoria por una lesión de tobillo pendiente de exploraciones más exhaustivas. Gálvez es el indicado para reemplazar al balear, antes que Dos Santos en la hilera de suplentes. Tras la buena actuación de los subalternos en la Copa, los habituales de la Liga regresan a escena, con la duda de si Adrián mantendrá la titularidad.
La sorpresa de la lista fue ver que Bebé no forma parte de la misma. Jota Peleteiro, resucitado en El Molinón, será reserva porque Inui se ha hecho con los servicios de la banda izquierda. Escalante y Kike García también guardan algún boleto para salir de inicio.
El nuevo Athletic
En el bando local hay revolución necesaria. Es como si demolieran la Torre Eiffel y el Louvre en París o como si abolieran las reuniones futboleras en las tascas de Pozas: faltan Aduriz y Raúl García, o sea, la razón de ser del actual Athletic.
Otra de las noticias es la presencia de Kepa Arrizabalaga en la portería bilbaína una vez que se ha materializado la marcha de Herrerín al Leganés. En el resto de líneas no parece que vaya a haber cambios reseñables más allá de los derivados de las citadas ausencias de Raúl García y Aduriz. Volverán San José y Beñat para dar ritmo a la medular, que tan escasa estuvo de juego en Las Palmas. Por las bandas Susaeta y Muniain parecen ser las alternativas con Williams como improvisado delantero centro en un ataque inédito.
En la defensa no habrá sorpresas, con Bóveda -cumpliría su partido 50 como rojiblanco-, Yeray, Laporte y Balenziaga