Honda evita la ruptura con McLaren
Alonso terminó octavo en la FP2 con el nuevo motor, que los de Woking definieron como “un paso adelante”; Hamilton lideró con mano de hierro
La primera jornada de entrenamientos libres en el GP de Austria sirvió para dar aire a Honda tras un inicio de campaña marcado por los constantes problemas de fiabilidad y la falta de potencia del propulsor nipón, algo que se repite por tercer curso consecutivo y que hacía que el ‘matrimonio’ con McLaren estuviera en plena crisis. Por fin, ayer Fernando Alonso y Stoffel Vandoorne pudieron montar en Spielberg la nueva especificación de motor que el asturiano probó en los libres de Bakú hace dos semanas y ambos lograron su primera victoria moral, la de encadenar dos sesiones sin ningún percance en su unidad de potencia, tranquilizando un poco los ánimos de McLaren, que negó que tenga intención de separarse de Honda en 2018.
Parece que la casa nipona habría mejorado la fiabilidad de su propulsor con una evolución en la que hoy en clasificación se podrá empezar a evaluar también por su presunto progreso en potencia. Alonso pudo terminar octavo en un día en el que McLaren podría haber conservado motor, aunque parece que los 15 caballos de más que podría dar esta actualización todavía son insuficientes. De hecho, en un circuito en el
que las diferencias son muy pequeñas, el español terminó a 1”249 del mejor crono de Hamilton.
Pese a ello, tanto McLaren como Honda valoraron de forma positiva
la reacción de los japoneses, que aunque ha llegado con retraso (se esperaba para Canadá), podría haber sido efectiva.
“Estamos aún lejos de donde queremos
estar, pero estamos en el buen camino”, explicó Boullier durante la rueda de prensa oficial de la FIA tras lo visto en pista, que fue suficiente como para asegurar la continuidad de McLaren con su socio y suministrador de propulsores. “Sólo se publicó una parte de lo que dije. No hay ninguna intención de alterar la actual situación para el año que viene. Tenemos un contrato y seguiremos trabajando”, expresó el francés, negando que haya posibilidades de optar por otro propulsor en 2018.
Por su parte, el jefe de Honda en la F1, Yusuke Hasegawa, expresó que “no tenemos ninguna intención de dejar la F1. Estamos más convencidos de seguir que nunca. Ahora mismo tenemos la asociación que queremos tener y no nos planteamos otra opción”. Eso sí, después de todo lo que ha pasado al frente del proyecto de Honda, Hasegawa sigue siendo cauto: “Estoy contento de que no hemos tenido problemas de fiabilidad. Nuestro motor ha contribuido a la mejora de los cronos. Creo que vamos en la dirección correcta y estamos recortando la diferencia con los líderes, aunque queremos más”, concluyó el japonés para firmar la paz con McLaren tras una tensa convivencia.
Esta situación podría alejar definitivamente a Alonso de Woking. Si el binomio se mantiene, parece improbable que consigan crear un motor capaz de ganar en 2018, y eso no satisface el ‘hambre’ del ovetense