“EL DESTINO QUERÍA QUE ESTUVIERA AQUÍ”
40 años y 16 Tours en sus piernas. Haimar Zubeldia es el ciclista más veterano del pelotón en el ronda francesa. Al de Usurbil le rompieron el corazón cuando el Trek Segafredo le comunicó que este año se quedaba fuera del Tour, pero la vida da vueltas en muy poco tiempo. ¿Quién sabe qué le deparará en París?
¿Qué ha hecho en su día de descanso?
He tenido la visita de la familia al hotel. He atendido muchas entrevistas por ser el más viejo del Tour. Hemos tenido una reunión de equipo y hemos salido a entrenar suave.
¿Qué balance hace de la primera semana?
Hasta el domingo las cosas iban como queríamos. Con la caída, Alberto al final no rindió como esperábamos, perdió bastante tiempo y se ha complicado la general. Todavía queda mucha dureza y vamos a dar guerra. Sabemos que Alberto está bien y seguiremos en la idea con la que habíamos venido.
¿Cómo está Alberto anímica y físicamente?
El domingo disgustado como es normal. Tenía que digerirlo. Ahora en la cena estaba más animado y recuperado.
A ti hasta ahora no te hemos visto mucho...
Las etapas de llano voy un poco más escondido. Otros hacen el trabajo. El jueves y el sábado en la montaña me encontré bien. El domingo pudimos ayudar a Alberto tras la primera caída para que enganchara antes de subir Grand Colombier. La verdad que Ag2r lió una gorda.
De la noche a la mañana le avisan para que vaya al Tour. ¿Cómo le ha afectado?
Sabía que estaba de reserva. Me lo dijeron una semana antes y es verdad que levanté un poco el pie. Seguía en Pirineos pero entrenando a menos intensidad. El martes a la tarde-noche me llaman y tuve que ir a casa corriendo para hacer la maleta porque volábamos al día siguiente.
¿Le dejaron el corazón roto?
Sí, lo puse en Twitter con emoticonos porque no era el momento de hablar. La verdad no me lo esperaba. Hasta el último momento estaba dentro. Fue una decisión que tomaron ellos, yo no la comparto. Pero bueno, el destino quería que estuviera aquí. En la vida te llevas disgustos y alegrías.
¿En las dos próximas semanas qué podemos esperar?
Queda todo el Tour por delante. Froome sale beneficiado porque se quitó a duros rivales por caídas, pero todavía quedan dos semanas duras. Hemos estado mirando y hay cinco días muy duros y puede cambiar todo.
¿Lo afronta como su último Tour?
Llevo haciéndolo así tres años. No lo sé. Sé que cada vez está más cerca la retirada, pero vamos a pensar en el Tour, luego haré la Clásica de San Sebastián y veremos. Tengo contrato hasta final de año, ahora a mitad de temporada no es momento de tomar esa decisión.
¿Suele pensar en cuál sería el broche de oro?
Sí que lo he pensado, yo también tengo mis sueños. Pienso en cuál sería un final bonito para mí, pero prefiero guardármelo.
16 ediciones del Tour de Francia en sus piernas. ¿Qué le dicen o preguntan los compañeros del pelotón?
Cuando la cosa se pone rápida y dura me preguntan si estoy seguro de querer seguir aquí. Les digo que aunque a veces sufres mucho se olvida y te quedas con lo bueno. En la habitación estoy con el más joven del equipo, Michael Gogl, y le doy consejos. Me siento en la obligación porque cuando yo empecé también me ayudaron.
Hasta ahora está siendo un Tour muy accidentado. Hay ciclistas que se quejan de que corren demasiado riesgo. ¿Cómo lo ve?
Es cierto que han puesto bajadas peligrosas, pero son circunstancias. En la caída de Porte no estaba el suelo mojado. Hay gente que intenta aprovecharse de estas situaciones pero cuando te la juegas lo mismo puedes ganar tiempo que perderlo. En el Tour hay que controlar el riesgo. Así es el deporte. Se está yendo a casa gente con la que se contaba y eso influye.
También se ha ido Sagan. ¿Cree que la expulsión es justa?
Para gustos colores. En cada ángulo se ve diferente. Es cierto que Cavendish se mete por dónde no debe, pero también es cierto que Sagan saca el codo. Los dos hacen mal. Yo creo que los comisarios quisieron dar un toque de atención porque últimamente los esprints se estaban descontrolando. Sé que era una decisión difícil para ellos, porque no es fácil mandar a casa al campeón del mundo, pero de cara al futuro creo que es positivo porque la gente que esprinta intentará llevar la trayectoria más limpia para no encontrarse una situación parecida.
¿A quién ve capaz de desbancar a Froome?
Está difícil. A Aru le veo muy fuerte. Creo que la preparación que ha llevado es buena. Se perdió el Giro por problemas, estuvo parado y esa frescura la va a notar. Quizás no tiene la misma experiencia que Froome, pero hay que ver. De momento es el que más cerca está. Bardet también está dando pasos año a año y Urán en silencio ha sorprendido y está ahí. Todavía todo está en el aire.
¿Qué podemos esperar de Contador?
Hemos contado que quedan cinco días duros. Con Alberto puedes esperar de todo. Ataques lejanos o dónde nadie se lo espera. Seguro que ya tiene algo pensado. Ha tenido todo el día para darle vueltas. Conociéndole sabemos que quieto no va a estar. Es de sangre caliente y hará entretenida la carrera