Medio minuto, seis etapas y cuatro candidatos a todo
Froome, Aru, Bardet y Urán, separados por 29 segundos; el francés y el italiano, obligados a atacar en la montaña
Chris Froome (líder), Fabio Aru (a 18”), Romain Bardet (a 23) o Rigoberto Urán (a 29). Salvo giro inesperado, uno de ellos se vestirá el domingo de amarillo para celebrar el Tour en el podio de París.
A favor de Froome juegan los galones, la experiencia y la fortaleza de su equipo, el Sky. Y, por supuesto, haber convertido el momento crítico antes de Peyra Taillade en una demostración de poderío. “No voy a dar ningún segundo gratis; igual que tuve un mal día en los Pirineos, podría tener un mal día en los Alpes”, avisó ayer, en la jornada de descanso.
Quedan seis etapas por delante, tres de ellas muy fuertes. Hoy, jornada menos exigente, con 165 km con dos puertos en la primera mitad (uno de tercera y uno de cuarta), previa a la gran lucha en la montaña del miércoles (Croix de Fer, Télégraphe y Galibier) y del jueves (Col de Vars e Izoard). Froome espera movimientos. “Aru ganó el primer asalto de montaña en La Planche y Bardet, que tiene a su equipo, siempre ha sido fuerte en la última semana”, avisó. Y, además, espera la crono del sábado. “Urán está bien situado y en ella es el más fuerte ahí”, afirma.
Obligados a atacar
Quizá por ello, Urán puede ser
más conservador. “Todos tenemos las mismas posibilidades”, afirma el colombiano, que confía en aguantar durante esta semana para aprovechar a su favor la crono. “He ganado alguna contrarreloj y me defiendo bien. Espero hacerlo bien el sábado”, cuenta.
Quienes no piensan en la contrarreloj, porque sí están obligados a jugar sus bazas antes, son Romain Bardet y Fabio Aru. El italiano ya sabe lo que es lucir el maillot amarillo del Tour y, a pesar
de que su Astana ha quedado debilitado durante estas dos semanas, no va a renunciar a nada. “Hemos perdido a Fuglsang y a Cataldo, pero estoy seguro de que quienes siguen lo darán todo hasta París. Nunca me canso de intentarlo y, si las piernas me lo permiten, atacaré”, avisó ayer.
Aru, campeón de la Vuelta 2015, tendrá presión por ser uno de los favoritos desde el inicio de la prueba. Eso sí, esta no será nada comparada con la que afronta Romain Bardet, la gran esperanza para que Francia se haga con su Tour 32 años después. “Hasta ahora no he dado el cien por cien. Estoy buscando, con paciencia, el buen momento para atacar. Espero que llegue. Tengo confianza porque ya luché por el triunfo el año pasado”, afirmó el francés, quien aseguró que la presión, visto el gran rendimiento de su Ag2r, no le preocupa.
Llega la hora de hablar sobre la carretera. El Tour de Francia entra en la semana decisiva con seis etapas, treinta segundos de diferencia y cuatro candidatos a vestirse de amarillo junto al Arco del Triunfo