Sainz: “En general ha sido un día positivo”
El piloto madrileño marcó el noveno mejor tiempo
El GP de Hungría debe significar el inicio de un nuevo capítulo en la temporada de Carlos Sainz. El madrileño suma dos carreras consecutivas sin terminar y quiere volver a brillar como lo hizo en 2016 y al principio de este curso. Para eso, el escenario de este fin de semana, el Hungaroring, era recibido con una enorme sonrisa por el piloto de Toro Rosso. El déficit de potencia de su propulsor Renault respecto a sus rivales no será determinante en un trazado en el que sí lo podrían ser las soluciones aerodinámicas planteadas por James Key. No obstante, el español tuvo que sudar más de lo necesario para poder rendir al nivel que se esperaba en el trazado húngaro.
En la FP1, el madrileño sólo pudo encontrar el reglaje adecuado para su coche en la parte final de la sesión, ya sin tiempo para mejorar la posición 14 con la que acababa la mañana. Las caras en Toro Rosso eran de preocupación y los de Faenza no parecían dar con la tecla para que sus pilotos consiguieran ir rápido. Pero todo cambió por la tarde, sesión en la que Carlos logró terminar noveno y por fin demostrar que también será un firme candidato a luchar por un puesto en la Q3 de hoy.
“En general, hoy ha sido un día positivo. Por la mañana tuvimos un comienzo un poco lento, tratando de asimilar las partes nuevas que llevamos en el coche, pero por la tarde las entendimos mucho mejor y tuvimos un coche bastante mejor que el de los primeros libres”, comentó el piloto, que actualmente ocupa la novena posición de la clasificación del Mundial.
“En la segunda sesión me sentí mucho más cómodo y el coche era mucho más rápido, así que entre unas cosas y otras ha sido un día en el que hemos hecho buenos progresos y estoy deseando reanudar el trabajo”, añadió el dorsal 55, que el pasado curso pudo sumar algún punto en Hungaroring conquistando la octava plaza. Esta vez, Sainz deberá luchar cara a cara con los McLaren y con los Renault, especialmente el de Nico Hülkenberg después de otro día para olvidar para Jolyon Palmer, que sigue haciendo méritos para que la marca del rombo le sustituya