La Europa League, en exclusiva para los abonados de la Real
Las obras y la normativa UEFA impedirá a la Real vender entradas para Europa
La Real anunció el sábado los precios para presenciar en directo los tres partidos de la liguilla de la Europa League y del mismo modo aclaró que no saldrán entradas a la venta para la competición europea, con lo cual será exclusiva para los abonados que accedan a pagar el suplemento, que en función del sitio en el que estén ubicados, cuesta entre 60 y 90 euros.
Los motivos que llevan al club a tomar la seguramente no deseada medida de no vender entradas están relacionados con la reducción de aforo que sufrirá el estadio por las obras, a lo que hay que añadir las estrictas medidas que exige la UEFA en materia de venta de entradas.
La principal limitación viene dada por el hecho de que el Estadio de Anoeta contará desde la segunda jornada de la próxima temporada con sólo 25.000 espectadores de aforo. 7.000 menos de los habituales. Teniendo en cuenta que la Real cuenta a día de hoy con 22.830 abonados, únicamente quedan 2.170 tickets disponibles para cada partido.
La UEFA obliga a los equipos que participan en competiciones europeas a reservar el 5% de los billetes para la afición visitante. Así las cosas, la Real deberá destinar 1.250 billetes a los clubs que le visiten. Si sumamos esta cifra a la cuota de socios, la cantidad de entradas ocupadas de antemano se elevan hasta los 24.080. Sólo quedan, por tanto 920 libres.
Teniendo en cuenta que la Real también debe atender los compromisos comerciales de la propia UEFA y los que tiene adquiridos previamente el club, el margen para la venta es tan reducido que el Consejo realista ha tomado la determinación de no sacar ningún ticket a ventanilla, con lo que el espectáculo de la Europa League estará destinado exclusivamente para los socios.
Está por ver cuántos de ellos retiran su bono europeo. De ahí podrían salir algunas entradas disponibles, aunque probablemente no sean demasiadas y también irían destinadas a los compromisos del club.
Sólo una carencia masiva en el pago del suplemento por parte de los socios podría variar el escenario